Según un análisis realizado en Clearsale, durante el cuarto trimestre del 2023 se detectó una nueva forma de fraude digital, el cual consiste en crear sitios falsos o piratas para vender productos “a buen precio”. Estos sitios pueden llevar a cabo múltiples delitos y son difíciles de ubicar para las marcas que están siendo afectadas ya que no se reflejan en los buscadores comerciales.
El tema es que, para atraer a los consumidores, los delincuentes siembran su publicidad en redes sociales, en plataformas de mensajería instantánea y en plataformas de publicidad digital. Normalmente ofrecen descuentos que son difíciles de resistir y el consumidor novato termina haciendo clic. Dicha acción es solo el comienzo del fraude ya que los enlaces llevan a un sitio e-commerce pirata, muy bien diseñado, que parece la tienda oficial de la marca. Pero además hay tres diferentes variantes adicionales:
- Venta de Productos Robados. Se trata de la venta de productos originales, que han sido robados a la marca en algún punto de la cadena logística. Lo más común en Colombia es el asalto al transporte, ya que de esta forma los delincuentes obtienen muchos productos en una sola operación. La mayoría de estos productos se venden en prenderías, locales comerciales, puestos callejeros, centros de reciclaje e incluso en el mercado negro en el exterior (como es el caso de los celulares de alta gama). En algunos casos los delincuentes ofrecen los artículos en línea mediante tiendas falsas, ya que no tienen que estar presentes físicamente y así disminuyen el riesgo de ser arrestados.
- Venta de Productos Piratas. Se trata de productos normalmente fabricados en Asia y que logran entrar a nuestro país de manera legal por las aduanas, ya que es muy difícil distinguirlos de los productos auténticos. Es decir, el cliente engañado compra en un e-commerce pirata y recibe un producto falso en su casa.
- En estos casos, el sitio web es simplemente un engaño para recolectar los datos de formas de pago como tarjetas de crédito y/o débito. La información de estas tarjetas es concentrada en bases de datos para su venta en línea a otros defraudadores a través de la dark web.
Este nuevo tipo de fraudes generan dos afectaciones a las marcas, la primera es en la reputación de la marca, ya que el consumidor afectado suele hacer público su reclamo en redes sociales y la segunda es problemas jurídicos, ya que algunas empresas son demandadas por fraude, aunque no hayan tenido nada que ver en el delito.
La pregunta es: ¿Cómo se puede defender el propietario original de la marca?
Debido al crecimiento de este tipo de delitos en los meses recientes, es importante que las marcas usen software que les permita defenderse 24x7 de la piratería, phising, e importaciones grises, entre otras prácticas ilegales. Algunos softwares SaaS permiten eliminar de forma automatizada y 24x7, amenazas digitales, incluyendo sitios web piratas que estén usando sin autorización el nombre de una empresa, sus productos, marcas e incluso sus logotipos.
Lo importante aquí es que los empresarios investiguen con las empresas especializadas en temas de RiskTech, cómo aplicar tecnología a su negocio para cuidar la reputación de su marca y evitar grandes pérdidas financieras.
