Entre los días 15 al 18 de noviembre en la ciudad de Neiva y en los municipios de Tello y Baraya del departamento del Huila se presentaron los proyectos ejecutado por la Pastoral Social de Florencia, Pastoral Social de San Vicente del Caguán-Funvipas, el Secretariado Diocesano de Pastoral Social de la Diócesis de Neiva y el Secretariado Nacional de Pastoral Social SNPS/CC. Instituciones que vienen fomentando la participación en diferentes espacios de comercialización e intercambio de los diferentes productores.
Entre ellos cabe mencionar Café Manantiales, que es sembrado y producido en las montañas del norte del Huila por 30 familias cafeteras de la región Altotroja en Baraya. Quienes en su producción son amigables con los recursos naturales, han implementado prácticas ecológicas y han impulsado el desarrollo familiar y comunitario de la región. Su café representa los sueños de hombres y mujeres campesinos desde los territorios más lejanos, que anhelan condiciones de vida dignas con justicia social y la construcción de una paz verdadera.
De la misma forma, esta Café letras Las Juntas que nace en el año 2014 como APROJUN. La asociación fue constituida por campesinos productores de café de la vereda las Juntas del municipio de Tello, Huila. Zona conocida inicialmente como Letras por la primera escuela construida como referencia para habitantes fundadores. En efecto, en el año 2015 se registró legalmente para iniciar actividades de comercialización de café.
Precisamente gracias el empoderamiento campesino frente a las dinámicas del territorio y su territorialidad, así como el apoyo del proyecto denominado Seguridad Alimentaria y desarrollo Rural SADER se pudo avanzar en estos procesos. En particular, fue ejecutado por la pastoral Social de Neiva a través de un convenio con el Secretariado Nacional Pastoral Social –Cáritas Colombia SNPS_CC y financiada por Cáritas Noruega. Desarrollo que refleja los sueños de las familias campesinas del norte del departamento del Huila.
Ambos procesos son la producción desarrollada con amor, esfuerzo y dedicación que contribuyen con el desarrollo de la región, con el mejoramiento de la calidad de vida de cada una de las familias y sus asociados y de la comunidad en general. Son proyectos que reivindican el ser campesino en un país eminentemente rural como establece los últimos datos cuantitativos. Para el próximo año se espera el acompañamiento de la academia, específicamente de la Universitaria Agustiniana.