Varios comerciantes del corredor turístico de la 70 se sienten molestos y perjudicados por la forma en que llegó la Secretaría de Salud de la Alcaldía de Medellín, justamente en la época de Feria de Flores, a cerrarles el negocio para evitar una posible intoxicación masiva, durante la temporada en que más ganancias adquieren.
Entre las razones que convergen los comerciantes del sector son: la manera arbitraria en que llegaron los funcionarios del municipio a cerrar el local, la fecha en que se realizó; partiendo de que era una campaña preventiva, pero se ejecutó en la época de mejor rentabilidad económica sin tiempo de antelación, teniendo en cuenta la crisis económica atraviesa el país.
Alrededor de veinte locales comerciales de comidas rápidas, restaurantes, panaderías, entre otros, se vieron afectados por el cierre que solo duró el período de las fiestas paisas. Algunos de los sitios que se vieron afectados son: Subfruts, El Tejadito, El Fortín, Yamipan, Café Barrio Central, Las Costeñitas, Sonitruchas, entre otros.
“El 27 de julio la secretaría de salud llegó de una manera muy agresiva sin mediar palabra, simplemente, si ellos evidenciaban una mala manipulación o falta de inocuidad, cerraban inmediatamente. Uno explicaba que desconocía esa resolución, la cual es una resolución del 2013, desde esa fecha no nos visitaban, por eso nosotros teníamos un desconocimiento, ya que la última visita fue en el 2012 cuando sacamos un concepto favorable. Entonces ellos argumentan que uno tiene que buscar la información, pero uno se ha acostumbrado a que ellos visitan. No hubo socialización alguna de esa norma y llegaron como disparando, apaguen todo y esto queda sellado por sanidad” relató el comerciante del restaurante El Fortín, Jorge Londoño.
Como ejemplos este comerciante cuenta los que ocurrieron con el local El Tejadito y Mario Bross, al primero no le dejaron entregar dos cajas de pasteles que ya estaban listos. Al segundo, le cerraron el local con gente comiendo en ese preciso momento, lo que para su gusto, genera una mala reputación para cualquier negocio.
“Por otro lado, me parece muy inconveniente la fecha que se escogió para hacer el sellamiento de los negocios. Que desde el folclor popular se dice que fue para favorecer a alguien, para favorecer otros locales o las ventas ambulantes. Porque aquí nos cerraron precisamente el 27, y el lunes fue el tablado con Henry Fiol, que era un artista de talla internacional. Alrededor del concierto de este artista son alrededor de diez negocios que cerraron”, aseguró Londoño.
Situación similar se presentó con el local comercial de Subfruts, el cual lleva 17 años funcionando en el sector y es la primera vez que les cierran, sin haber hecho una actividad preventiva de socialización.
“Lo que más nos ha incomodado a los comerciantes del corredor turístico la 70 ha sido la forma en que nos trataron a nosotros. Que tengo errores te los puedo aceptar, obviamente, los corregiré. Quiero prestar un buen servicio, pero esta no es la manera. Yo sé que ellos tienen todas las justificaciones desde el punto de vista técnico, conocimiento y aceptamos el cierre y ciertas condiciones. Lo que no nos parece pertinente de un empleado público es la forma en que te tratan a ti en el momento de hacer la diligencia, acusándote casi como si fueras un criminal”, afirmó la comerciante de Subfruts, Sandra Vásquez.
“Me dicen que el baño no puede estar donde se encuentra ¿por qué no me lo dijeron en 17 años? A mí me han hecho cambiar varias veces, le cambio para darle gusto al funcionario de turno, llega el otro y tengo que volver a lo anterior, si bien no han sido cambios graves eso cansa e involucra dinero. Una alcaldía que habla de cultura ciudadana y viene hacernos esto de esta manera arbitraria a comerciantes que estamos pagando impuestos, que somos legales. Entonces por qué no hacen una campaña de educación y hacemos las cosas bien” complementó la comerciante.
Ambos comerciantes manifiestan que al solucionar los inconvenientes que les plantean desde esta cartera, luego proceden a pedir una nueva visita, pero a ella acude un funcionario distinto con diferentes criterios, lo cual vuelve muy complicado el proceso, que generalmente implica dinero y más tiempo.
Adicionalmente, manifiestan inconformidad porque los citaron de forma obligatoria a un taller de prevención dos semanas antes al arribo del papa Francisco, algo que a su consideración debió haber sido con más tiempo, pues significa una improvisación teniendo en cuenta que vendrán cerca de un millón de personas a visitar la ciudad durante la estadía del sumo pontífice.
Pese a que contactamos a la líder del proyecto de la secretaría de salud, Luz Viviana Gómez, quien coordina el grupo técnico encargado de realizar las inspecciones en los establecimientos públicos, nos programamos para una cita un día y luego nos aseguró que podría más tarde, por lo cual no fue posible concertar un encuentro para hallar una respuesta desde esta entidad.
Como nos ha ocurrido con varias secretarías de la Administración Municipal, hay que hacer todo el proceso y esperar a que ellos nos quieran responder a los periodistas, pero los que siempre están dispuestos a contarnos la versión son quienes se ven o se sienten perjudicados por las decisiones administrativas, y ahí está, comerciantes que se sienten afectados por la Alcaldía que quieren prestar un buen servicio, pero aseguran que no les dan las herramientas de educación por medio de campañas, sino con leyes represivas.