Ante el mundo nos mostramos como los más felices, los más camelladores, los más simpaticos, en fin la representación mas clara del sabor latino… Las cifras no miente es solo que no tienen en cuenta todos los factores y con un punto difícil de negar. Somos tramadores y nos gusta aparentar. Y eso en esencia no es malo, pero nos obliga a ocultar nuestras falencias y no trabajar en mejorarlas..
Históricamente asociados con los excesos, pecados y el dinero fácil, nos acostumbramos tanto a eso que hasta novelas, series, documentales y chistes se volvió nuestro diario vivir.
En otros países nos indignados por que nos digan en broma, “Trajo la pasta”, pero aquí nos enorgullecemos por sacarnos una foto con un asesino de la época. Afuera hablamos maravillas del trato entre nosotros, pero aquí nos matamos hasta por no dar para la “vaca”.
En fin, ejemplos hasta la vuelta de la esquina, pero que nos hace orgullosamente Colombianos? La capacidad de aguante ante las adversidades, el caer y levantarnos, el buscar una casita para la vieja y la platica de la U para los hijos, el votar por unos vampiros del poder y saber que pese a eso seguimos confiando en que algún día eso cambiara.
Pero algún tendremos que despertar, levantar con orgullo la frente y elegir buenos lideres, arrancar de tajo la corrupción y dejarles un camino lleno de esperanza a nuestros hijos…
Compatriotas el momento es ahora y es deber de cada uno ser el ejemplo que no vemos en aquellos que elegimos para hacerlo. Si cada uno de nosotros se propone saludar, ayudar y colaborar esta joda cambia…. Dios los bendiga