A veces siento que lo del político en Colombia es un chiste, por estos días muchos se meten a las barriadas, comunas y sectores populares, en una patética puesta en escena se revisten de falsa humildad para buscar los votos de los colombianos más ingenuos y así llegar al Congreso. Al parecer muchos “padres de la patria” que buscan reelegirse olvidaron que votaron favorablemente el aumento del IVA en la reforma tributaria, es decir, en campaña van a buscar el voto de la gente más humilde para hacerse elegir, pero cuando llegan al Congreso votan en contra de la gente humilde que los eligió. Infortunadamente muchos de ellos volverán al Capitolio y seguirán votando las reformas y leyes que nos tienen condenados a la desigualdad más vergonzosa del mundo. ¿Cómo explicar tamaño sinsentido?. No sé. Tal vez los colombianos somos masoquistas y seguimos eligiendo a nuestros verdugos.
No olvidemos la indignación que en 2016 causó el aumento del IVA del 16 al 19%. Cereza de la corona de una reforma tributaria regresiva, lesiva con los colombianos más humildes y favorable a los intereses de los ricos y poderosos, la misma reforma que desmontó el impuesto a la riqueza para aumentarle el costo de vida a todos los colombianos. ¿Quiénes la votaron? Muchos de los congresistas que ahora hacen campaña por nuestros barrios y ciudades, algunos tan cobardes que se molestan cuando son confrontados por haber votado en contra del pueblo, contra los más pobres que en Colombia somos una gran mayoría. Abusan del desconocimiento de los colombianos más humildes y le achacan de tajo la reforma a Santos, nada más alejado de la realidad, pues fueron ellos, favorecidos por mermelada, clientelismo y en defensa de intereses particulares, quienes votaron sí a la reforma que subió el costo de todo en nuestros hogares.
Por eso, amigo colombiano, revise muy bien por quién va a votar a Cámara y a Senado. Lo invito a que evalúe la gestión de su candidato, pregúntele cómo y por qué voto la reforma tributaria, no vea al político como la persona que solo sirve para dar plata o trabajo. No. Esa persona va a tomar decisiones que lo van a afectar a usted, su familia y sus oportunidades. Decisiones que nos pueden seguir condenando a la miseria o que pueden cimentar la posibilidad de construir un país más justo. No olvide que al ser elegidos ellos tienen la obligación constitucional de velar por el interés general y rendirle cuentas a la sociedad y a sus electores. No hay que tener miedo de confrontarlos. Seguramente se vienen más reformas tributarias, IVA, aumento de edad para pensionarse… esa persona que va buscando su voto será la encargada de tomar esas decisiones. Si tiene hijos piense en ellos al momento de votar. ¿Qué tipo de país les quiere dejar? Acaso, ¿continuará eligiendo a sus verdugos?