Cinco actos de perdón que van desde secuestros de narcotraficantes, hasta el asesinato de familias enteras por parte de las FARC y humillaciones por cuenta de paramilitares, han sido el comienzo de un largo camino que le espera a la paz en Colombia:
El ex Presidente Andrés Pastrana visita a su secuestrador en la cárcel de Cómbita
Foto: elmundo.es
Andrés Pastrana mira a los ojos a Popeye, el sicario de Pablo Escobar, que lo secuestró en 1988. 25 años después le da la mano en la cárcel de Cómbita, Boyacá. Esto le dijo Popeye: “Yo de corazón le pido perdón por lo que yo hice, por lo que hizo el Cartel de Medellín, por poner en riesgo su vida tan importante, por hacer sufrir a doña Nora, a sus hijos y a su papá, yo le pido perdón. Se lo pido de corazón, doctor ¿oyó? Se lo pido de corazón”.
El chocano Leyner Palacios le perdona a Catatumbo el dolor de Bojayá
Foto: FARC-EP
Leyner Palacios estaba en la iglesia San Pablo Apostol de Bojayá junto a más de 100 personas cuando el cilindro bomba lanzado por el Frente 58 de las FARC dependiente de la estructura de Pablo Catatumbo, explotó. Recogió cadáveres, consoló a muchos. Esto le dijo al jefe de las Farc: “El perdón yo lo veo como una oportunidad para seguir viviendo conmigo mismo, pues para estar tranquilo y seguir adelante con la vida. Es bueno perdonar (…) Si queremos cambiar este país, las víctimas tenemos que empezar los procesos de perdón urgentemente".
La caquetana Constanza Turbay perdona a Iván Márquez por el asesinato de su familia
Foto: semana.com
Constanza Turbay se quedó sin vida cuando las FARC asesinaron a su padre, madre, y dos hermanos, en actos de secuestro y fusilamiento entre el año 1995 y 2000, en Caquetá. Se exilió en Suiza y ahora hace parte de la Comisión de Víctimas en La Habana. Esto dijo sobre su encuentro con Márquez:
“En el primer intervalo Iván Márquez se acercó con sentimientos de sinceridad, me pidió perdón. No fue un perdón mecánico, fue un perdón de corazón. Me dijo que fue una equivocación lo que cometieron con mi familia y que contara con que irían a esclarecer toda esa verdad. Como les digo, ha sido el encuentro más trascendental en toda mi vida y que grato que a través de un diálogo podernos encontrar, buscar caminos, de claridad, de reconciliación”.
La cucuteña Marleny perdona a El Iguano lo imperdonable
Foto: semana.com
Marleny se quedó sola, con un hijo de dos años, cuando el Frente Frontera de las AUC, comandado por El Iguano, asesinó a su esposo en el 2003. 10 años después, en un acto de perdón en la cárcel de máxima seguridad de Cúcuta, se vieron a los ojos por primera vez. Marleny estaba con su hijo Daniel, tomó el micrófono, le pidió a El Iguano que subiera a la tarima, lo tomó del brazo y le dijo: “Hace 10 años usted asesinó a mi esposo y dejaste a este niño huérfano cuando apenas tenía dos años”. Pero yo te perdono”. El Iguano se tapó su cara con las manos mientras refregaba fuertemente las lágrimas de sus ojos con los dedos. Luego Daniel, el hijo de Marleny, hoy ya con 13 años, le tomó el otro brazo al Iguano, y le dijo: “¡y yo también te perdono!”.
El urabeño Gelson Mosquera perdona el dolor de la masacre La Chinita
Mosquera lloró a su padre en la masacre de la Chinita. Era 1994 cuando el quinto frente de las FARC comandado por ‘Karina’ fusiló a 35 personas mientras bailaban en una fiesta. Años después de la masacre, Gelson prestó servicio militar en la brigada 18 del Ejército y le brindó seguridad a Karina, cuando se desmovilizó. “Si sentía como rabiesita, como miedo a la vez. No sé, como algo maluco. 21 años después no guardo resentimiento”.
