Un documento de la organización indígena kankuama reza entre otras: “vemos con preocupación que durante los primeros días del 2018, los pueblos indígenas de Colombia hemos sido sometidos a la violación de nuestros derechos a través de amenazas, desplazamientos y asesinatos, lo que nos condena al exterminio y a la desaparición física, cultural y espiritual como guardianes de la madre tierra. Ya son tres indígenas asesinados por las armas del ejército colombiano lo cual agrava la situación”. Están haciendo alusión, entre otros, al reciente asesinato del Guardia Indígena mayor Eleazar Tequia Bitucay del pueblo indígena Embera Katio en el departamento del Choco.
Eleazar Tequia fue asesinado el 26 de enero. Eleazar ejercía desde hacía diez años como coordinador de la Guardia Indígena en su resguardo. Las organizaciones indígenas han denunciado el hecho como un asesinato de parte del Ejercito Nacional, que se sumaría entonces a otros dos asesinatos que se le agregarían a la institución, como lo reseña la organización indígena Kankuama.
En otro contexto, el día 27 de enero, en el barrio Isla de la Paz, en la comuna número 6 de la ciudad de Buenaventura, dos hombres que se movilizaban en motocicleta asesinaron al líder social Temístocles Machado, defensor de derechos humanos perteneciente al proceso de comunidades negras y uno de los dirigentes participante del comité central del reciente paro cívico adelantado en el puerto de Buenaventura.
Ver: Asesinan a líder comunitario en Buenaventura
En el portal de Colombia plural se lee: “En un bombardeo del Ejército sobre la comunidad indígena de Chagpien Tordó, en el municipio de Litoral del Río San Juan (Chocó) resultó gravemente herida una joven de 16 años. El bombardeo, que el Ejército justifica como un operativo contra el Eln, provocó un desplazamiento masivo de esta población, que se suma al desplazamiento forzado de otras 350 personas que abandonaron Carmen de Darién.
A estos hechos se suma la dura arremetida contra los líderes y lideresas sociales. En los primeros 30 días del año ha sido asesinado uno cada 48 horas. En total, y con los datos conocidos, son 15 líderes asesinados en 9 departamentos del país. Antioquia, sucre, Norte de Santander y Bolívar han sido especialmente golpeados. Solo en el martes 30 de enero fueron asesinados tres de ellos: Nixon Mutis y Nilson Dávila en Cantagallo Departamento de Bolívar y Leidy Amaya en San Calixto, Norte de Santander”, señala el artículo. En Buenaventura y en muchas regiones del país están asesinado al pueblo y los crímenes no paran: la pregunta es el porqué.
Ver: Enero: un líder asesinado cada 36 horas
El 9 de enero terminó el cese al fuego pactado entre el gobierno colombiano y la insurgencia del Eln e inmediatamente el ejército colombiano respondió con operativos a gran escala, como lo señala el Irlandés Geraoid en su artículo aparecido en el portal del Salmón Urbano bajo el título de “el Eln y el cese al fuego”, preparados y planeados mucho tiempo atrás y el Eln puso su granito de arena con acciones armadas en varias partes del País”, puntualiza Geraoid.
Ver: El Eln y El Cese al Fuego
Rápidamente el señor presidente Santos el día 29 de enero se pronunció al respecto, ordenando no asistir a Quito Ecuador a su equipo negociador, hasta tanto el Eln no muestre disposición.
Ver: Presidente Santos anuncia suspensión del quinto ciclo de conversaciones con el Eln
Si el 9 de enero terminó el cese al fuego y no se pactó su prolongación, significaría entonces que se continuaría negociando en medio de la guerra, o por el contrario, se dialogaría para alcanzar un nuevo acuerdo de cese bilateral. El Eln por su parte, un día antes del posible inicio del quinto ciclo de conversaciones con el gobierno nacional, desde la delegación de diálogos en Quito Ecuador, en cabeza del comandante Pablo Beltrán, comunicaba “A pesar del dolor que nos causa las muertes de esta guerra, especialmente las de líderes sociales y guerrilleros, continuamos con el propósito de bajar la intensidad del conflicto pactando un nuevo cese, que mejore la situación humanitaria de la población; al tiempo que avanza la participación vinculante de la sociedad en un diálogo nacional, que aporte a transformar a Colombia en un país en paz y equidad”.
Ver: Bajar la intensidad del conflicto es un esfuerzo bilateral
Mientras una estructura urbana del Eln reconocía la noche del pasado domingo en un comunicado el atentado a una estación policial en Barranquilla, donde el sábado murieron cinco agentes y otros 41 fueron heridos, las organizaciones sociales llamaban a un desescalamiento del conflicto. También Naciones Unidas insiste al Gobierno a tomar medidas para frenar los constantes ataques en contra de los liderazgos en los territorios. Según la ONG Front Line Defenders “se esperaba que el acuerdo de paz entre el gobierno y las Farc diera lugar a una disminución de la violencia. Sin embargo el número de asesinatos ha aumentado”.
Ver: Más de 300 activistas fueron asesinados en 2017
Victoria Sandino una de las antiguas comandantes de las Farc, ahora en la legalidad y quien visitara la ciudad de Ibagué en el Departamento del Tolima, en el marco de su campaña política como partido Farc, fue entrevistada este 31 de enero por los compañeros del Salmon Urbano para alternativa Latinoamericana, de quien escucharemos sobre los incumplimientos del estado a esta organización hoy en proceso de paz.
En varias oportunidades el Eln ha manifestado desconfiar del gobierno colombiano ante lo que se viene observando respecto al proceso con las Farc. Pero, la situación es mucho más grave de lo que pareciera. Junto a Victoria Sandino también otros miembros de este nuevo partido la acompañaban. Donald, antiguo insurgente de las Farc y hoy perteneciente a la fuerza alternativa revolucionaria del común hace graves denuncias que involucran al ejército de Colombia en su comportamiento en el Sur del Tolima y que podrían estar repitiéndose en otras regiones. Lo escucharan ustedes en este “Reporte Colombia”, para Alternativa Latinoamericana.
Cuenta Victoria Sandino Palmera, proveniente desde el municipio de Tierralta en el departamento de Córdoba donde nació y creció, hacia el departamento Tolima en donde desde el año 1994 estuvo integrada a la resistencia en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, que perteneciendo a la Unión Patriótica y para evitar ser asesinada en el marco del genocidio promovido por el estado contra esta organización, solo le quedaba la opción de exiliarse o ingresar a la guerrilla, optando por esta última.
Será por todas estas situaciones, aquí apenas bosquejadas, que por espacio y tiempo no podemos dar a conocer más ampliamente que el comando central del Ejército de Liberación Nacional le ha pedido al gobierno coherencia con los compromisos adquiridos, pero también insiste en que se reinicie el quinto ciclo de diálogos, como lo pide igualmente buena parte de la sociedad y especialmente los empobrecidos del país.