En tiempos difíciles económicamente, cualquier ser humano racional, piensa en dejar de lado muchas "austeridades", para obtener de cada billete el máximo beneficio posible, pero nosotros los nacidos en Colombia parece que actuamos de forma totalmente diferente.
Solo han pasado unos días, desde que se aprobó el aumento MISERABLE que tendrá el salario mínimo en Colombia y que por supuesto, fue un tema de opinión generalizado desde La Guajira hasta el Amazonas y cruzando cualquier espacio de tierra desde Nariño hasta el Vichada, pero pareciera que el aumento, no resulto ser tan miserable para la mayoría de compatriotas. Es cierto, que es época de fiestas pero me MOLESTA leer estados y tuits de gente que esta INDIGNADA por la variación del salario, pero que comprueba que esta tomando el mejor licor disponible en cualquier almacén de cadena del país. Tan pronto, el reloj marcaba las 6 de la tarde en Colombia y el calendario fijaba que era 31 de diciembre, millones de colombianos "celebraban" las festividades con botellas de Old Parr, Blue Label y Chivas Regal en sus manos, hablando con sus familiares y amigos de la "insufrible" situación socio-económica que vivimos en la actualidad.
Si el momento financiero por el que se esta pasando, resulta tan complejo, es una completa hipocresía derrochar dinero en "vicios" como el alcohol. Siempre se dice: "cuando uno esta en condición, hace lo que le venga en gana con sus pesos". Pero si esta tan complicado todo, no es para nada coherente terminar pagando botellas de licor de mas de 100 mil pesos, si tenemos en cuenta que estamos "peleando" por el aumento de menos de 27 mil pesos, que evidentemente son "pelos de gato" al lado de la suma mencionada anteriormente.
Con esto, no pretendo decir que no podemos darnos "gustos", pues en realidad los merecemos porque hemos trabajado todo el año para obtenerlos, pero entonces nos seamos tan "caraduras" de estar refiriéndonos a que "nos vamos a morir de hambre", cuando en realidad estamos en una condición envidiable, viviendo en la opulencia y el derroche total.
No podemos seguir creando imágenes falsas de "lastima", tenemos que educarnos mucho mas financieramente, para que al otro día de la noche de fiesta, no estemos despertando sin una moneda en el bolsillo, maldiciendo la corrupción en la que vivimos y deseando no ser colombianos, porque claramente esto solo es el resultado de nuestros actos. Primeramente, votemos bien el próximo año y cambiemos nuestros hábitos para poder llegar a vivir en el paraíso que debería ser Colombia, pero que por nuestra mentalidad y actos no llega a ser siquiera un lugar "medianamente" normal.
