“En cinco días vuelvo” fueron las palabras de la diputada Claudia Zuleta, cuando fue por última vez al corregimiento de Mandinguilla, Cesar. Ya han pasado más de 765 días y todavía no ha regresado.
En su campaña a la Gobernación del Departamento del Cesar, la excandidata se mostraba comprometida y con sensibilidad social al respecto a la población del corredor cítrico del Cesar. Pero a pesar de que no ganó la gobernación, sí alcanzó el segundo puesto en las elecciones, lo cual le permitió ocupar una curul en la duma departamental.
Sin embargo, pese a las promesas y compromisos de campaña, la hija de Poncho Zuleta no se le ha vuelto a ver ni en las curvas por la región. En su otrora visita electoral hablaba de jalonar el IDH (índice de desarrollo humano) en el centro del Cesar. Los campesinos y agricultores, a pesar de no saber con qué yuca se comía lo que decía, aplaudían, gritaban y chiflaban a todo pulmón.
Aunque es una obviedad y muy frecuente el actuar de los políticos después de campaña, no está de más exponerlos en su actuar para que por lo menos se les aplique la censura social.