Las polémicas vacaciones que tuvo Claudia López en el año nuevo y el segundo pico de la pandemia han afectado gravemente su desempeño. Las encuestas de popularidad registradas en las últimas semanas muestran un desplome de su valoración.
López defendió sus vacaciones como una solicitud de sus médicos y recordó en entrevista con W Radio uno de los momentos más duros de su vida. En octubre de 2013, la entonces analista recibió un diagnóstico de cáncer de seno en etapa temprana. Se sometió a una operación para evitar que su enfermedad se agravara y pusiera en riesgo su vida.
La situación llegó en un momento crítico: las denuncias de Claudia López contra Kiko Gómez motivaron amenazas de muerte en su contra. Desde entonces, su intensa carrera política como senadora, candidata vicepresidencial, promotora de la Consulta Anticorrupción y alcaldesa se ha combinado con una serie de tratamientos y consultas para evitar la recesión de su enfermedad.
Fueron los médicos que trataron su cáncer quienes le pidieron a López que, para evitar deterioros a su salud, se tomara unas vacaciones. La mandataria y su esposa, la senadora Angélica Lozano, viajaron el 1 de enero a Costa Rica, mientras los casos de coronavirus crecían aceleradamente en Bogotá. López cortó sus vacaciones después de dos días, cuando la ciudad volvió a cuarentenas por localidades.
