La periodista Claudia Gurisatti ha dado un muy mal ejemplo de libertad de expresión, tolerancia y autocrítica.
Por eso, me dije que debía esperar a que pasaran los días y las noches en que fue tendencia en redes.
Hubo unas etiquetas de las redes sociales en las que se criticaba la forma que utilizan RCN y su directora de noticias para hacer periodismo.
Mi decisión obedecía sobre todo a la intención de evitar malos entendidos y esperar a que se bajara la marea, como dicen los pescadores.
Algunas etiquetas decían #PeriodismoDeshonestoRCN, cuya autoría se la habían atribuido a la fan page La Naranja Castrochavista.
A mí me asombra que una página de Facebook ponga a tambalear a todo un Canal. Yo sé que la empresa de rollos y cámaras fotográficas Kodak quebró, debido en parte a los muchachos Kevin Systrom y Mike Krieger, quienes crearon Instagram.
No obstante, lo dudo mucho. Al contrario, me atrevo a creer que Claudia Gurisatti le dio más visibilidad a La Naranja Castrochavista. Yo no sabía de su existencia.
Las palabras de una persona como la directora de Noticias RCN tienen un alcance importante. Y al pronunciar el nombre de dicha página, los sacó de Facebook y ahora todo el mundo le ha dado "me gusta" a La Naranja Castrochavista. Ya no están en el anonimato.
El periódico El Espectador les realizó una entrevista. En ella los creadores de la página aseguraron “que jamás han amenazado a Claudia Gurisatti”.
La verdad es que son muchos los que sugieren que el periodismo de RCN y Claudia Gurisatti está inclinado, declinado o sesgado.
El estado del clima informativo en las redes sociales a ratos se pone ardiente; a veces se registran tormentas noticiosas.
Así que si creas una cuenta en las redes sociales, ya no estás en el Monte Olimpo. Es probable que algún día caigas o subas en una tendencia. El abogado Abelardo De La Espriella quiso ser un trend topic y lo logró. Con tan poco esfuerzo y dinero, fue tendencia en Twitter, al menos por un día.
Si te crees una divinidad o un intocable, aléjate de las redes sociales, porque no son para ti. Dios no crea perfiles digitales, crea mundos, diría Ernesto Sábato.
La civilización digital es otro mundo. Aquí los expertos son los niños, no los adultos. Además, Claudia Gurisatti se comporta como una persona muy delicada, que no soporta comentarios desfavorables. ¡Qué cosa!
Así no son las cosas. Si Claudia Gurisatti no acepta opiniones sobre su oficio, estamos mal, muy mal. Aquí no hay súper ciudadanos.
Yo lo he dicho una y mil veces que me gustan los contradictores exquisitos, con argumentos felices y propositivos. Si no traen argumentos, por lo menos que sean respetuosos. Creo que quien ha leído mis columnas de opinión tiene todo el derecho de comentarlas, sin olvidar quien leyere y sin olvidarme yo mismo que no soy infalible. Yo me equivoco, pero creo que puedo ser mejor.
Habría que preguntarle a la periodista Claudia Gurisatti si cree que su periodismo es totalmente honesto, si no comete errores y qué piensa del asesinato de su colega, el periodista Jaime Garzón.
Son dudas que zumban en las cabezas de los colombianos y que merecen respuestas. No se olvide usted, estimada directora, que dar clic en una publicación en las redes sociales y compartirla puede ser una forma de identificación con lo que allí se dice y también una forma de pagarle el favor a la persona que publicó o que envió el post.
Si usted no entiende la dinámica de las redes sociales, puede estar tambaleando en su cargo como directora de noticias de su canal.
Con su actitud, no solo demostró su enojo por ser tendencia en Twitter, sino, con todo respeto, mucho desconocimiento acerca de la cultura digital, que le incumbe.
No solo la información es un poder, el cuarto poder, dicen los expertos; el conocimiento también es un poder. Los saberes sobre las tecnologías de la información y la comunicación es un imperio.
Quien ignore esto es un analfabeto en nuestros días. Conozco personas que no saben leer ni escribir, pero ejercen un gran dominio de las herramientas digitales. Ya no interesa que sepas leer mucho para poder desarrollar las ciber habilidades.
Y esto RCN no debe despreciarlo. Al contrario, valorarlo en su justa medida y aspirar a ser cada vez más transparente, pues la audiencia no es estúpida.
El poder absoluto está ha relativizado lo bastante. Por eso, con Foucault yo creo que el poder se encuentra en todas partes. Principalmente, en el pueblo, al que algunos tratan de ignorante.