En la cárcel de La 40, en Pereira, donde paga su condena de 12 años, el liberal Carlos Heberto Ángel, exdirector del Instituto Municipal del Deporte y Recreación de Ibagué - IMDRI quien firmó los contratos con la española Typsa que terminaron siendo un gran robo que dejó a los ibaguereños sin escenarios deportivos, recibió la más alta sanción de la Procuraduria: una inhabilidad por 20 años. Según la Procuraduria, Angel recibió $300 millones para firmar los contratos irregulares con Typsa, de manos de Orlando Arciniegas, el cerebro del desfalco de USD $90 millones. Este es el cementerio de escenario que esta gigantesca corrupción le dejó a la ciudad.
Fue Orlando Arciniegas, mano derecha del entonces alcalde liberal Luis H. Rodríguez, quien por delegación del burgomaestre armó un equipo para distribuir los contratos con las constructoras españolas Typsa, Grupo Ortiz y Vera Construcciones. En tanto Arciniegas era un asesor externo, el funcionario responsable de la firma de los contratos era Carlos Heberto Ángel, cabeza del instituto de deporte. Fue él quien determinó que los escenario que ya existían en la ciudad eran obsoletos y le entregó a los españoles el poder para destruir lo que había y volverlo a armar. El escándalo de sobornos alcanzó los USD 15 millones en sobornos. La reconstrucción nunca se pudo hacer y las obras quedaron suspendidas.
El anuncio del presidente de Coldeportes, Andrés Botero, en el 2013 no pudo ser más prometedor: Ibagué quedaría dotada con escenarios deportivos de clase mundial para los Juegos Nacionales del 2015. A tres empresas españolas - Typsa, Grupo Ortiz y Vera Construcciones - le entregaron la responsabilidad de diseñar y remodelar el Parque Deportivo y el Complejo Acuático de la calle 42. Se robaron los recursos sin dejar un solo escenario deportivo listo. Las pérdidas se calculan al rededor de $90 mil millones de pesos.
Coldeportes y el alcalde de Ibagué Guillermo Jaramillo, se han propuesto la reconstrucción de los escenarios, pero están cortos de presupuesto, situación que se agrava aún más con los últimos anuncios presidenciales de reducir a ceros la inversión en infraestructura.
El ventilador de la se prendió cuando identificaron a Luis Rodrigo Uribe como uno de los artífices y lo capturaron. Él accedió a contarlo todo. Sus denuncias tienen ya a ocho implicados en la cárcel: Orlando Arciniegas, asesor principal del Alcalde; Carlos Heberto Ángel, exdirector del Instituto Municipal del Deporte y Recreación de Ibagué, IMDRI; Gloria Inés Martínez, empresaria de la alta sociedad ibaguereña; Oswaldo Mestre, exsecretario de Hacienda de Ibagué; Jorge Orlando Navarrete, jefe de licitaciones de Typsa; Wilmer Manchola, contacto entre Arciniegas y Typsa. La mayoría de ellos hacen parte del círculo íntimo del exalcalde de Ibagué, Luis H. Rodriguez, quien apenas estalló el escándalo vendió la mayoría de propiedades pero que sigue viviendo en la capital tolimense.
El escándalo hasta ahora ha estado centrado en el contrato del diseño realizado por la española Typsa pero está pendiente la investigación del desfalco en la construcción en cabeza del Grupo Ortiz y Vera construcciones, ambos españoles. Mientras tanto los tolimenses se quedaron con un cementerio deportivo en las calles de Ibagué.
@jjjaramillo2
Publicado originalmente el: 10 de agosto de 2017
