Analizando los resultados de las elecciones del 11 de marzo y el cambio de panorama político en Santander, podemos decir que el Centro democrático se convirtió en la segunda fuerza política en el departamento.
Lo anterior, con un excelente resultado de Iván Duque, quien logró 235.717 votos en Santander, siendo de los mejores del país; superando el resultado de Óscar Iván Zuluaga en primera vuelta de 2014, ganando en todos los municipios, incluso Floridablanca, uno de los fortines de Marta Lucía Ramírez, por la maquinaria y fuerza de su ahijado político Héctor Mantilla.
El voto del CD en Santander demuestra una vez más la fuerza que tuvo el pasado 2 de octubre en el plebiscito y da un duro golpe de opinión que posiciona a Iván Duque con un gran favoritismo en la carrera presidencial. Además, en materia de Senado, el CD incrementó su votación, aunque deja el sinsabor de no lograr sacar un senador.
De otro lado, en Cámara se presento el principal cambio, logrando 2 credenciales, superando así la votación de 2014 de 66.805 a 140.522 votos, convirtiendo a Óscar Villamizar y a Edwin Ballesteros en los nuevos representantes a la cámara por el Centro Democrático en Santander.
Los resultados crecieron gracias a la conformación de unas excelentes listas con buenos candidatos a la Cámara (Liliana de Cotes, Berta Beltrán, Liliana Kleinner, el Chumi Castañeda, Iván Aguilar) que aunque no lograron los resultados esperados, con su buen ejercicio político impulsaron la votación de las listas. Sin ellos no se hubiese podido lograr las dos credenciales para el partido y al Senado (Quintin, Carlos Alberto Gómez y Leszli Kalli), que con su trabajo defendieron las tesis del del partido en departamento y la unión de ellos genera una gran ilusión con poder mejorar el resultado de Iván Duque este 27 de mayo.
En Bucaramanga y el área metropolitana se vio el incremento del voto uribista, casi duplicando las anteriores elecciones. Igualmente, también se puede destacar el papel de la provincia que sigue añorando y agradeciendo la labor del expresidente Álvaro Uribe Vélez.
Con la caída de uno de los partidos tradicionales como el Conservador y la desinflada de Cambio Radical que se había ilusionado con la inclusión de Clan Aguilar para subir en votación —aunque el resultado no fue el esperado—, la derrota de Bernabé Celis que muchos se la atribuyen al escándalo en los últimos días con su compañera sentimental, más la crisis fronteriza y el cambio en el panorama político de Santander, el crecimiento de la votación al logo del Centro Democrático se convierte en garantía de votos.
Todo esto deja al CD en una muy buena posición, premiando un trabajo disciplinado, un diálogo constructivo con los lideres y el pueblo, que junto a la militancia que viene desde hace años, ha contribuido con el crecimiento de este partido; incluyendo a los jóvenes del departamento, quienes han formado la juventudes del CD, que seguramente serán un gran apoyo porque ven en Iván Duque una muy buena opción para lograr la presidencia. Su gran resultado el 11 de marzo y sus propuestas puntuales son consideradas como “un bocanada de aire fresco en la política”, como lo dijo el exalcalde de Bogotá Jaime Castro y las personas que se sumarán por la afinidad a Marta Lucía y Alejandro Ordóñez, piezas fundamentales en esta gran alianza.
