El soldado Fabio Torres marcó un hito en la historia de las fuerzas armadas, con su esfuerzo también se convirtió en todo un referente dentro los veteranos con discapacidad. En 2020 Fabio alcanzó en Tokio uno de los trofeos más buscados por los paraatletas, una medalla paralímpica. Como buen deportista Fabio buscara llegar al podio dentro de la categoría de Power Lifting (levantamiento de pesas adaptado). Ahora, solo toca esperar si el próximo sábado 7 de septiembre Torres consigue repetir medalla.
En 2008, el veterano perdió su pierna siendo cabo del ejército, una consecuencia de un atentado, en Catatumbo Norte de Santander. Es decir, la vida le cambio en la época del segundo gobierno de Álvaro Uribe. La política de seguridad democrática impuso combates férreos entre la guerrilla y las fuerzas armadas. En esa época la guerrilla respondió con explosivos a los bombardeos de la fuerza aérea, durante ese contexto, Fabio perdió una extremidad al pisar una mina antipersona.
Por el accidente Torres debió ser traslado de Norte de Santander. Tiempo después dentro de su proceso de recuperación, en Bogotá, el militar conoce el Centro de Rehabilitación Inclusiva (CRI). Lugar donde inició su nueva faceta como deportista, es decir, el Centro es el sitio donde comenzó su vida como atleta paralímpico. El nuevo camino no fue fácil y para llegar al podio debió pasar un arduo entrenamiento de horas, días y meses. El fruto de su esfuerzo fueron las medallas.
El Centro de Rehabilitación Inclusiva
La infraestructura del CRI se inauguró el 29 de agosto de 2016. La ceremonia de apertura estuvo dirigida por el expresidente de la república, Juan Manuel Santos, y el exembajador de Corea del Sur en Colombia, Jang Myung-soo. El representante del país asiático estuvo presente por el apoyo financiero de Corea del Sur en la construcción del CRI, uno de los tantos agradecimientos de Corea a Colombia por haber participado en la guerra de Corea.
Corea de Sur tiene vínculos fuertes con Colombia, gracias a la participación del Batallón Colombia en el conflicto de Corea. De acuerdo a los registros se estima que un total de 5062 hombres de las Fuerzas Militares Colombianas hicieron presencia en la península. Tiempo después, el gobierno de Corea respondió el gesto, por ejemplo, mediante estatuas, el apoyo a los veteranos del conflicto o financiando proyectos de infraestructura en el país.
Retomando, la infraestructura del CRI es una de las más modernas en América Latina, por ejemplo, en las instalaciones hay una estación donde el usuario simula el servicio público de Bogotá, es decir, la persona tiene una muy buena preparación para enfrentar el Transmilenio o el STIP. Sin ir más lejos, varios beneficiarios del Centro mencionan la labor del lugar para darles un nuevo sentido a sus vidas.
Otra promesa en los pasillos del Centro
El soldado José Carlos Hoyos ha seguido un camino parecido al de Fabio. Aunque en el caso de José el atentado fue en Frontino Antioquia el 19 de abril del 2022, cuando explotó una bomba al paso del vehículo militar en el que se transportaban once soldados. Siete de ellos murieron, tres sobrevivieron con heridas leves y Hoyos perdió las dos piernas. José por el accidente pasó unos meses de recuperación en el Batallón de Sanidad en Medellín.
Meses después de ese atentado, el militar terminó en el (CRI), que también se le conoce como la Dirección de Veteranos y Rehabilitación Inclusiva (Divri). Como ya se mencionó dentro de la Dirección los usuarios encuentran un camino más allá de las Fuerzas Armadas. Hoyos en el Divri encontró la esgrima y la posibilidad de rehacer su vida en el deporte. Lleva meses practicando, en efecto ha conseguido varios trofeos y por su talento aspira a competir internacionalmente. Como ya se mencionó la labor de la Dirección no es menor.
La nueva vida que comienza en el Centro de Rehabilitación donado por Corea
Por sus instalaciones han pasado al menos 756 miembros de las fuerzas armadas con algún grado de discapacidad. Donde les ayudan a conseguir un nuevo rumbo a su vida, ya sea mediante el estudio, el deporte u otra manera.
El CRI si bien tiene una de las instituciones de infraestructura más modernas de América Latina no es un club, es decir, los miembros beneficiarios del Centro dependiendo del plan de los profesionales de acompañamiento pueden usar o no las instalaciones, todo depende del programa del usuario. Quienes tienen vocación de deportistas el CRI les despeja el camino a las grandes competencias nacionales e internacionales. Muchos beneficiarios han logrado dar varias glorias al país.
En 2023, por ejemplo, miembros de la Divri participaron en los juegos Invictus y para 2025 se espera la participación de 22 veteranos de las fuerzas. Las nuevas ediciones de los juegos se celebrarán en Canadá y están programadas para febrero del próximo año.
Los juegos Invictus, otro escenario para los deportistas con discapacidades
Los juegos Invictus son unos eventos deportivos creados por el Príncipe Enrique de Inglaterra donde los participantes son miembros del ejército en condición de discapacidad. En otras palabras, los Invictus pueden verse como las olimpiadas de los soldados con un grado de discapacidad. Los juegos incluyen baloncesto en silla de ruedas, voleibol sentado, remo etc. Del mundo hispanohablante en 2023 Colombia fue el único país con delegación en los juegos hechos en Dusseldorf-Alemania. Con mucha seguridad la delegación colombiana hará historia como lo está haciendo en Paris 2024.
Los paralímpicos la gran prueba que inauguró el Presidente Macron en Paris
La participación de la delegación de Colombia en los Paralímpicos de Paris, que inauguró el presidente Macron el 28 de agosto, una vez concluyeron los Olímpicos, ha sido notable. La delegación colombiana ha conseguido, por ahora, un total de 4 oros, 6 platas, 7 bronces
Esperemos que el monteriano José Carlos Hoyos pueda traer medallas, y de pronto en 4 años llegue con una presea de Los Ángeles. Ahora el veterano se prepara con entusiasmo y persistencia para ello usa las horas dentro del Centro de Rehabilitación inclusiva, el lugar donde las heridas de guerra se transforman en oportunidades para rehacer la vida.
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