La carta que Alejandro Ordóñez le envió al candidato Iván Duque del Centro Democrático prendió el avispero político en 2018, al menos en lo que respecta a la coalición de centroderecha que se planteó desde las elecciones de octubre de 2016 cuando los votantes representados por los expresidentes Pastrana, Uribe, el exprocurador Ordóñez, los exministros Martha Lucía Ramírez y Óscar Iván Zuluaga obtuvieron la victoria.
Ese triunfo electoral se había comenzado a cocinar el 10 de agosto de 2016, cuando una gran masa de católicos salió a protestar por toda Colombia, luego de que exministra Gina Parody quiso imponer las cartillas con "ideología de género" en todos los colegios de Colombia, hoy vuelve a estar en boca del país político.
En ese momento, el gobierno de Santos vio por primera vez la fuerza dormida de millones de colombianos que profesan valores muy diferentes a lo que la "ideología de género" representa; y es que según la cadena norteamericana de noticias CNN, los católicos en Colombia llegan al 94%.
Pero volviendo a 2018, hay que advertir que con la carta que le envío Ordóñez a Duque es claro que el exprocurador no va a ceder en temas muy puntuales, los cuales fueron los mismos que le convocaron a los católicos a votar ese dos de octubre en contra de los acuerdos Santos-Farc.
A pesar de que a simple vista hay muchos puntos de convergencia entre los miembros de la coalición, lo cierto es que Uribe y Pastrana se inclinan a temas jurídicos, políticos y económicos, mientras que Ordóñez es mucho más radical en esos mismos puntos y tiene como base la familia y la lucha frontal contra la "ideología de género", la cual según sus palabras “no representa al pueblo católico” y ese es un punto en el cual el exprocurador no está dispuesto a ceder.
Sobre el particular el propio Ordóñez expresó lo siguiente en su misiva a Duque: “Es inamovible el desmonte de la llamada ‘ideología de género’ que pretende destruir la familia, descristianizar la sociedad vaciándola de sus principios y valores. Este asunto fue, tal vez, la causa más importante para movilizar a millones de colombianos y decirle no a los acuerdos de La Habana. Así lo reconoció el mismo Juan Manuel Santos. 'Mandé a hacer una encuesta y el 60% de los que votaron no, lo hicieron en contra lo que ustedes llaman ideología de género’”. Según la carta de Ordóñez en reuniones posteriores al 2 de octubre.
¿Estamos todos los candidatos de la coalición del NO de acuerdo con los inamovibles que nos señaló el pueblo el 2 de octubre? Esta es mi respuesta a la carta enviada por el Dr. @IvanDuque. @AlvaroUribeVel @AndresPastrana_ @mluciaramirez pic.twitter.com/K37UUSnB3f
— Alejandro Ordóñez (@A_OrdonezM) January 8, 2018
De regreso al segundo semestre de 2016, vale la pena recordar el papel que tuvieron varios sectores del catolicismo, el cual se comenzó a ver físicamente el diez de agosto cuando diversas comunidades se congregaron alrededor del Ministerio de Educación para protestar contra Parody y jurídicamente previo a la votación del dos de octubre, cuando el abogado Samuel Ángel, Director Ejecutivo del Movimiento Católicos Solidaridad, mostró a la opinión pública que los acuerdos de La Habana tenían entre sus pilares principales la ideología de género.
Ver nota: El responsable del escándalo de ideología de género en los acuerdos
Desde entonces y hasta finales de 2017, Ángel ha hecho varias denuncias y eventos para manifestar el inconformismo católico en contra de las Farc, el Gobierno Santos y la critica situación de corrupción que vive el país. Hace un par de días este abogado, se reunió con representantes de varios sectores de las bases del catolicismo para determinar una estrategia en torno a que candidaturas van a apoyar en las elecciones de legislativas y presidenciales.
Sobre le particular el abogado Samuel Ángel comentó: “Inicialmente en Bogotá, en oración, bajo la coordinación de la Mesa Distrital del Movimiento, y ahora, posteriormente en la Mesa Nacional, se consideran las opiniones del católicos de todo el país, que bajo una visión evangelizadora, en el marco de la Doctrina Social de la Iglesia, opinen sobre los destinos de la patria que nos vio nacer. Tal como ocurrió el dos de octubre de 2016, la consigna es unirse en torno a una causa que nos represente”.
A su vez, otros miembros del catolicismo que estaban buscando recoger firmas para tener una lista propia, se han ido a otros partidos políticos que les dieron su aval, pues la Registraduría no les avaló las firmas que presentaron el pasado mes de diciembre para tener listas propias.
En fin, 2018 será un año crucial para Colombia en materia electoral, y por lo visto el factor religioso será determinante en este nuevo proceso democrático, que marcará el pulso entre un país que quiere mantener intacta su filiación cristiana y otro que se inclina por las denominadas ideas "progresistas".