En los 10 años que duró la construcción de ocho estadios en el desierto catarí murieron 6.751 trabajadores por las condiciones extremas en las que se construyeron, sin agua muchas veces, sin comida, con unas jornadas de 18 horas al día. Mano de obra barata para construir carreteras y hoteles que necesitaban para deslumbrar al mundo.
Una dictadura feroz que mandó a las galeras a miles de personas. La familia real catarí, que tiene una fortuna de 350 mil millones de dólares, compró el mundial repartiendo plata a dirigentes como Platini o Julio Grondona. Por eso hasta un personaje tan cuestionado como Joseph Blatter se ha arrepentido de darle el mundial a un país sin tradición futbolística.
En este interesantísimo hilo de Twitter se explica porque Catar es un mundial que no debería jugarse jamás. Estas son las razones por las que este es un mundial maldito:
QATAR 2022, EL MUNDIAL MALDITO.
Jon Kokura"Lo que mal comienza, mal termina" decía mi abuelita, que era sabia y muy bonita.
Hace 12 años, en diciembre del 2010, Joseph Blatter, presidente de la FIFA en aquellos años anunciaba que el mundial 2022 se iba a jugar en Qatar.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Los únicos que saltaron de sus asientos felices como lombrices fueron los integrantes de la familia Al Thani: Son amos y señores de Qatar, ese pequeño territorio metido en el Golfo Pérsico con una sola frontera terrestre, Arabía Saudita, nación con la que se llevan bastante mal.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Qatar está sentado sobre la tercera reserva de gas y petrolera del planeta y su población es de 250.000 cataríes + 2.750.000 trabajadores inmigrantes. Sí, el 80% de la población son extranjeros.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
En Qatar la palabra democracia es un chiste de mal gusto.Allí la que corta el queso es la familia real Al Thani y el jeque Tamim Bin Hamad Al Thani de 42 pirulos y tres bellas esposas... por el momento.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Como son los dueños de Qatar, su patrimonio ronda los 350.000 millones de dólares.Y como ya no saben que hacer con tantos petrodólares, aparte de construir fastuosos edificios, al cuete en el desierto y comprar clubes de fútbol, el PSG entre otros.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
¡Dale! contestaron todos...Y compraron un mundial de fútbol. Les salió barato.
Le pagaron un millón de dólares a ciertos delegados de la Concacaf (Centroamérica); un millón y medio a otros de la Conmebol (Sudamérica), un par de millones por aquí y otro más allá...— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Dicen que el crack del fútbol francés Michel Platini, que se las daba de virgen, casto y puro, cobró 7,5 millones de dólares.Y el capo di tutti capo, el argentino Julio Grondona (fallecido el 2014) se embolsó 10 palos verdes por dar el sí a Qatar 2022.
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De inmediato la realeza catarí se puso manos a la obra.
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Tenían que construir estadios de fútbol, en un "país" donde nadie jugaba al fútbol. El proyecto original era de 12 estadios y quedaron en ocho, uno de ellos desmontable, que van a "donar" a algún país donde sí se juegue al fútbol.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Si usted tiene en su barrio una canchita rasca y piñinienta, escríbale al Emir de Qatar, ¿quién sabe? por ahí le regalan el estadio desmontable.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
El asunto fue que para construir los ocho estadios, hoteles, aeropuertos, autopistas y centros comerciales necesitaron mano de obra barata, muy barata...a pesar de estar podridos en dólares, y llevaron trabajadores inmigrantes al por mayor, ....
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
.... en un sistema de esclavitud llamado "Kafala" que consiste en darle todo el poder a un administrador (negrero) para que contrate inmigrantes y los explote reteniéndole los pasaportes, haciendolos vivir hacinados, ....
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
.... y con horarios de trabajo hasta de 18 horas por día, sin derecho a pataleo y mucho menos a cambiar de empleo.
Sin este sistema perverso, construir lo que se construyó en Qatar, con temperaturas que varían de 30° a 50° a la sombra era imposible.— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Desde el 2010 murieron en las faenas un promedio de 12 obreros por semana. Un total de 6.751 trabajadores inmigrantes murieron para que usted; "¡Viva el fútbol!"
Esto sin contar los obreros de Kenia y Filipinas, donde no se llevan registros migratorios.— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Las cifras de muertos aportadas por informes de The Guardian, la BBC (Inglaterra) y Amnistía Internacional son las siguientes: India 2711; Nepal 1641; Bangladesh 1018; Pakistán 824,Sri Lanka 557.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Se construyeron 8 estadios espectaculares, pero manchados de sangre. Están tan cerquita el uno del otro que si usted es bueno pa' andar en bicicleta, los recorre todos en poco más de mediodía.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Hace poco en Irán, una mujer de 22 años llamada Mahsa Amini murió en manos de la policía por “usar mal el velo".
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Esto causó una ola de protesta en Irán y el mundo entero, como si en Qatar las mujeres se pudieran vestir como se le canta a los ovarios, como si tuvieran derecho a decidir por si mismas, como si pudieran jugar al fúbol…
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
El lado femenino de la FIFA crece día a día; las ligas de fútbol femenino son cada vez más populares, pero el mundial 2022 se va hacer en un territorio donde las mujeres tienen prohibido practicar deporte, entre muchas otras cosas.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
En Qatar, sobre la periodista mexicana Paola Schietekat que trabajaba para el cubrimiento del mundial, pesa una condena de siete años de prisión más cien latigazos, con fecha 19 de febrero 2022, por haber denunciado a un colega colombiano que la violó en territorio catarí.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
El violador era casado, entonces la mujer violada es la culpable, según "la shaira", ley islámica que "controla" a las mujeres…
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Un mes va durar el mundial 2022: 30 días en que las usinas cataríes estarán funcionando a full para mantener el aire acondicionado en los ocho estadios, hoteles, centros turísticos y comerciales, arrojando al aire humo contaminante, ....
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
.... equivalente a diez mil autos tirando smog sin filtro por hora.
Todo sea por la fiesta del fútbol... Porque el deporte es salud ¿vio?— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Pero hay una sombra más siniestra sobre Qatar 2022: La posibilidad latente de atentados terroristas. Los musulmanes no olvidan ni perdonan, aunque digan que sí.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
La familia real de Qatar ha financiado a oscuras facciones terroristas en Siria, Irak, Libia y Afganistán. En Libia financiaron a los terroristas que asesinaron al líder Muamar el Gadafi en octubre de 2011.
¿Por qué no van a arruinarle "la fiesta" a la realeza pro yankee catarí?— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
De esto nadie habla...Todos cruzan los dedos, rogando que ningún musulmán suicida se haga el martir, volándose en medio de un montón de gente, como ocurrió en el 2021 en el Aeropuerto de Kabul.
En Europa, al mundial de Qatar le llaman: "El mundial de la vergüenza".— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Hay un movimiento en ciudades francesas para no poner pantallas gigantes en lugares públicos de París, Marsella, Burdeos, Estrasburgo, Lille, etc.
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Es una forma de protesta por un mundial de fútbol que se llevó la vida y sueños de miles de trabajadores inmigrantes que no le importaron a nadie, por ocho estadios fastuosos que durante treinta días estarán repletos de hinchas, y vacíos por toda la eternidad…
— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
Por un capricho de la familia Al Thani, que el 2010 compró un mundial de fútbol, en un mundo en crisis, con millones de desplazados por hambre y con hambre, en el vértice de una guerra nuclear…
¡Viva el fútbol!— Oscar Alberto Montoya J. (@OscarAMontoyaJ) November 13, 2022
