Desde Estados Unidos, el exfiscal anticorrupción Gustavo Moreno, condenado por lavado de activos y vinculado al escándalo del Cartel de la Toga, echó al agua al a exmagistrado José Leonidas Bustos y al expresidente de la Corte Suprema, Francisco Ricaurte. Los acusó de manejar los contactos de corrupción en la corte. El cartagenero se encargaba de hacer el relacionamiento entre los aforados investigados con los magistrados para salir bien librados en procesos penales mientras que Bustos abogaba dentro de las votaciones a favor de los investigados.
Ricaurte se entregó a las autoridades a mediados de marzo de 2020 por su autoría en el Cartel de la Toga acusado de los delitos de corrupción, cohecho, tráfico de influencias y concierto para delinquir. El Juzgado 10 de Bogotá lo sentenció a 19 años y un mes de prisión que deberá pagar en la cárcel La Picota y el juez indicó que no le dará casa por cárcel. El expresidente de la Corte Suprema no podrá volver a ejercer cargos públicos y deberá pagar una multa de 485 salarios mínimos que equivalen a 440.635.110 millones de pesos.
La defensa del cartagenero presentará el recurso de apelación y el caso pasará al Tribunal Superior de Bogotá.
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