Solo te he escuchado hablar bien de los muertos. Pero ni más faltaba; de niños o muertos de derecha. Nunca te has pronunciado contra el asesinato de un líder social en este país, y eso que chances has tenido.
De resto, bilis y más bilis. Una desgracia para el periodismo: ves lo que quieres ver. Te viniste de España de la mano de una compañía comercial y Pacho Santos te acogió desde el día uno,con columna en El Tiempo.. Tu familia lo recibió en el exilio, y ahora son los mejores de los amiguis de la vida. Dios los hace, ustedes se juntan.
Por eso le has perdonado todo. Le alcanzaste a decir que si toda la oligarquía fuera como él, la oligarquía no tendría esa mala imagen… ¡Por Dios! Es el estereotipo de lo peor de la oligarquía. Él vendría siendo nuestra pequeña, y más lenta, Duquesa de Alba.
De resto todos han pasado por el veneno que emanas, que sudas, muchos con sobrado mérito, otros solo por la pura crucifixión de no ser de derecha. Es la típica amargura que sienten muchos por la muerte del Generalísimo. Pero tranquila que sigue en pie el Valle de los Caídos, él se fue de muerte natural, y no hay que continuar la cacería de brujas contra todo lo que no sea facho.
La emprendes contra Iván Cepeda llamándolo emisario de las FARC, pero firmaste el prólogo de Mi Confesión, el libro que inmortalizó a Carlos Castaño. Te presentaron en el premio de columnistas de El Mundo con bombos y platillos como “La voz incómoda para Colombia” pero aún así pediste este feo pasaporte. Nadie mejor.. Acabas a todos los partidos acá - menos el de Uribe cuando era de Uribe - pero le lavaste la imagen del Partido Popular, reencauchados de La Falange. Acabas al proceso de paz, con unos 5 o 6 tuits diarios, pero citando portales mediocres y fanáticos como El Expediente.
Sin importar de donde sea uno, es mamón respirar el odio ajeno. Por eso Fernando Vallejo está hoy tan sobrevalorado. Pero hay que tener un poco más de cuidado, de respeto, o por lo menos de cordura. No me imagino un colombiano con una columna en El País en el que se dedique a enlodar a España. Aunque eso habla de nuestra reminiscente colonización mental; abrazar como a una estrella rock a una extranjera que odia y odia y odia.
No es una cuestión de falta de autocrítica. Soy el primero en quejarme de todo, este es un país hecho a las patadas, pero si te quedaste es porque algo te gusta, ¿no? Por favor, por amor de Dios, ¿qué diablos es lo que te gusta de este país?
Me encantaría poder rapear, hacer de esto una tiradera, y no tener que rebajarme a tu mismo lodazal de andar despotricando a diestra y siniestra… o en tu caso, despotricar de la izquierda, contra la izquierda y más izquierda.
Quédate, quédate mucho y sigue dándole palo a los corruptos. No sabes cuanto me alegra la pelea que tienes contra los Yepes. Yo soy caldense y sé lo que se han llevado. Pero este es el chiquero al que te viniste a vivir, así que si darás la lucha por mejorarlo, hazlo de verdad, sin defender a Pachito y su combo. Pasea, disfruta, compártenos lo que te gusta, empieza a creer, porque es mejor aceptarlo, De Cara al Sol no sonará nunca más. Por lo menos por acá.
