Calderas, Tierradentro, 27 de noviembre de 2013
Profesor
ANTANAS MOCKUS
Referente ético de Colombia
He leído con detenimiento la entrevista que usted le concedió a María Jimena Duzán, en la revista Semana, en la cual dice que “lo más probable es que nos vayamos con el apoyo de la Alianza Social Independiente” y en la que señala que va a buscar que se hagan leyes que favorezcan la paz, postulado con el cual me identifico plenamente.
Considero también, junto con una cantidad de conciudadanos, que usted es una persona imprescindible en la política y que desde el senado, sus aportes por la paz y por la reconciliación de los colombianos, serán definitivos para lograr una sociedad más justa e incluyente.
No obstante, debo hacerle una reflexión sobre la ASI (independiente) porque es probable que usted no conozca a plenitud ciertos hechos del pasado cercano.
Dice usted, profesor Mockus, que “Mi identidad con ese partido es interesante. Ellos cambiaron de Alianza Social Indígena (ASI) a Alianza Social Independiente. Cuando eran indigenistas,(subrayado mío) la alianza tuvo la sabiduría de apoyarnos a Fajardo y a mí. Cuando los politólogos me preguntan cómo hice para reducir en mi Alcaldía el clientelismo a cero, les digo que fue por el apoyo desinteresado de la ASI. Ellos nunca llegaron a pedirme un puesto. Fueron estoicos. Con ellos las condiciones de independencia que tendríamos serían óptimas. Y eso es absolutamente cierto: en esa época la ASI era indígena, aun no nos la habían birlado y los postulados eran claros: cero clientelismo. Por eso, ni a usted ni al profesor Fajardo le solicitamos cuota burocrática alguna.
Infortunadamente, algunos miembros de la ASI, que entendían la política de otra manera, consideraron que lo que se debía hacer era exactamente lo contrario; esto es: traficar con avales y hacer componendas con políticos tradicionales. Para eso realizaron una convención política en la ciudad de Santiago de Cali y sin vergüenza alguna, bajo la regla de la mayoría simple, nos arrebataron el partido indígena y lo convirtieron en “independiente.”
Con este esquema no solo expulsaron a Piñacué, rechazaron el ingreso de Petro a la organización con el pretexto de su pasado guerrillero, sino que se aliaron, por cuotas burocráticas, con la política tradicional; como ocurrió en el caso del hoy gobernador del Valle del Cauca, Ubeimar Delgado; o, como con el caso del alcalde de Cartagena que resultó siendo ayudado por la “Gata.”
Por eso, usted tiene razón cuando dice “cuando eran indigenistas” porque lo que hicieron, con su politiquería, los absurdamente autodenominados “independientes” fue exactamente lo mismo que hicieron los españoles cuando llegaron a estas tierras: despojar a los indios.
Usted a lo mejor recuerde, que yo no me lancé al senado en la pasada legislatura, para darle salida a nuevos liderazgos, pero ante la perdida de nuestro partido indígena a manos de quienes ahora se presentan con tanta generosidad ante usted; le manifiesto que acabo de inscribirme como aspirante al senado por la circunscripción especial indígena; para desde la indianidad luchar por la igualdad y la inclusión, y para que los indígenas colombianos volvamos a tener un partido de origen étnico.
Espero que usted, profesor Mockus, le dedique un espacio a reflexionar sobre lo que acabo de manifestarle, porque abrigo temores, no sobre usted ni su coherencia, sino por las verdaderas razones que puedan tener en el alma sus posibles nuevos mejores amigos de la Alianza Social Independiente.
Cordialmente
JESUS ENRIQUE PIÑACUÉ ACHICUE
Aspirante al senado indígena por el resguardo de Calderas