Señor Peñalosa,
Muchos creen que usted fue el alcalde que resolvió la movilidad en Bogotá con Transmilenio a pesar de los mil líos que tiene este sistema hoy en día. Por supuesto, su campaña defiende que esta degradación de Transmilenio no fue culpa suya (supongo que previó muy bien el crecimiento de la demanda), sino de las administraciones posteriores.
Entonces, ¿Quién mejor que usted para sacarnos del hueco en el que estamos? Supongo que este es un argumento razonable. Sin embargo, y me disculpo pues soy una simple ciudadana inexperta en movilidad, veo su programa de gobierno y me quedan más preguntas que respuestas sobre la fórmula mágica en movilidad que nos propone. Acá solo diré las dos que más me preocupan. Espero sinceramente que me las pueda resolver.
En primer lugar, usted promete construir la primera línea del metro. Eso sí, ha dejado claro que no va a usar los estudios actuales del metro, pues no le gustan. Para que no cunda el pánico -ni lluevan las críticas- al pensar que tenemos que esperar años para nuevos estudios que sí le gusten, nos recuerda que el metro solo movilizará al 5 % de la población, y entonces no tener metro “no es tan grave”. Discúlpeme la ignorancia, pero a mí las matemáticas no me dan.
Los datos más recientes nos dicen que cerca de siete millones de pasajeros se movilizan diariamente en transporte público, y que de esos siete millones, un poco más de dos millones utilizan Transmilenio. Los estudios del metro prevén un total de un millón de pasajeros diarios, lo que corresponde no al 5 %, sino a cerca del 15 % del total de pasajeros movilizados al día. Aunque para algunos puede que suene poco, esto también quiere decir que los escasos 27 km del metro (como se tiene pensado hoy en día y como a usted no le gusta) van a movilizar a la mitad de personas que movilizan los 113 km del Transmilenio, cosa que, en mis ojos de ciudadana, que sufre el día a día el horror de entrar a un articulado en hora pico, es grande. Significa descongestionar el transmilenio en un 50 % o, por lo menos, recoger parte muy importante de la demanda que este sistema no va a ser capaz de acoger los próximos años.
Esto me lleva a mi segunda gran pregunta. Porque su propuesta estrella en movilidad es llegar a 300 km de transmilenio, pensando que esto va a suplir en cierta medida la demanda de la que le acabo de hablar. Pero veamos el contexto: detrás de Río y Sao Paulo, Bogotá es la ciudad con sistema de buses “tipo transmilenio” (BRT) más largo en latinoamérica, a pesar de tener una población considerablemente menor a estas dos ciudades. Sin embargo, la productividad operacional del sistema (IPK) está lejos de ciudades como Guayaquil, Guadalajara o Medellín, que tienen sistemas mucho más cortos. Y si no me cree los datos, una simple búsqueda en google lo confirma.
Quizás lo que estas ciudades entendieron es que los sistemas BRT funcionan mejor cuando hacen parte de un sistema integrado, que, no voy a negarlo, usted también propone. Pero no entiendo bien cómo lo va a crear, si desde ya se está disculpando de alguna manera si no hace el metro. Entonces ¿vamos sacrificar muchos kilómetros para uso exclusivo de transmilenio, en vez de usarlos para agilizar el servicio del SITP, o creando bicicarriles que tanto éxito tienen en muchas ciudades? ¿Hay que seguir poniendo a Transmilenio por encima de otros medios de transporte que tanto necesitamos mejorar?
Con todo respeto, señor exalcalde, su plan de gobierno en temas de movilidad me suena como un capricho de proteger a su “niño consentido” de Transmilenio, pues sigue empeñado con unas ideas que creo que le harán más mal que bien a nuestra ciudad. Un candidato con amor a Bogotá, no intentaría confundir a los ciudadanos con cifras extrañas, y reconocería que no estamos en la ciudad de hace 15 años, y que a veces, solo a veces, podemos equivocarnos.
