Ginebra, 1 de abril de 2020
Doctor
Iván Duque Márquez
Presidente de la República
Palacio de Nariño
Bogotá D.C.
Excelentísimo Señor Presidente:
Los abajo firmantes, nos hemos enterado por diferentes medios de la acción humanitaria desplegada por los gobiernos de Israel y Suiza al disponer de vuelos a Bogotá para traer a sus ciudadanos y al mismo tiempo transportar a colombianos en estos aviones. Este ofrecimiento fue brindado por los gobiernos extranjeros a través de las misiones diplomáticas de Colombia en el exterior pero con desconcierto la Misión en Ginebra alertada guardó silencio. Somos en mayoría profesionales colombianos que trabajamos en
algunas de las veinticinco organismos internacionales de Naciones Unidas, en las instituciones financieras, las organizaciones no gubernamentales, universidades o institutos con sede en Ginebra. Nuestra misión a diario es la de trabajar por Colombia
desde el exterior con honestidad y vocación de servicio.
En medio de la pandemia de Coronavirus que hace de Suiza un epicentro, son más las dificultades que las buenas noticias, y por esto muchos de nosotros hemos intentado volver a nuestro país para estar cerca de nuestras familias y seres queridos. Desde que el Consejo Federal suizo anunció estrictas medidas incluido el cierre de escuelas, el teletrabajo, el reforzamiento de controles en la frontera y la prohibición de reuniones, buscamos fórmulas para regresar a Colombia. Todas ellas sin éxito por la ausencia de boletos aéreos o el alto costo de los mismos.
Hoy sentimos una enorme frustración al saber que el pasado domingo 23 de marzo el Gobierno Suizo ofreció cupos en un vuelo humanitario, cuando aún las fronteras estaban abiertas. Podemos asegurar después de haber hecho las comprobaciones necesarias que
la empresa Edelweiss realizó la ruta Zúrich-Bogotá-Zúrich con una aeronave Airbus con capacidad de más de 200 pasajeros. Es lamentable saber que la misma decoló con menos de 40 connacionales.
La falta de comunicación por parte de la Misión Permanente de Colombia ante Naciones Unidas en Ginebra, la única autoridad colombiana en nuestra jurisdicción, es la responsable de que jamás se nos avisara de la existencia del vuelo humanitario. En ningún portal, red de comunicación o cualquier otro canal, la Embajadora Adriana Mendoza Agudelo, advirtió a la comunidad colombiana sobre esta situación. Es más, en ninguna oportunidad, ella nos ha reunido como ocurre con otros embajadores.
Esta semana, por medios nacionales nos hemos informado que el “Gobierno subsidiará a colombianos que no hayan podido regresar al país”. Se advierte que la Cancillería se encuentra coordinando con las embajadas y consulados la identificación de los connacionales para que se informe de sus necesidades y se exploren soluciones.
Pese a que la función de los servidores públicos de Colombia en el exterior es, entre otras, salvaguardar los intereses de sus connacionales, hasta el momento la responsable de la Misión Permanente de Colombia en Ginebra guarda silencio. Reprochamos esta situación causada por una funcionaria insolidaria y ejemplo de una burocracia improductiva y negligente.
Cordialmente,
Colombianos residentes en Ginebra entre los cuales estamos:
Teresa Acosta
Julio Avella
Ana María Suárez
Ricardo Espinoza
Julián Villaraga
Mónica Granda
Efraín Avella
Cristina Muñoz
Yara Melisa Caicedo
Jairo Rodríguez
Simón Muñoz
Jairo Rodríguez
Leonardo Rodríguez
Myriam Soto
Maritza Cardona
Antonio Tangarife
Enrique Sánchez
Olga Montoya
Andrés Martínez
María Adelaida Muñoz
Ramón Muñoz
David Torres
Entre otros colombianos que quisieran firmar esta carta pero no quieren sufrir represalias por parte de la Misión de Colombia ante Naciones Unidas en Ginebra
Con copia:
Claudia Blum de Barberi, Ministra de Relaciones Exteriores
Fernando Carrillo Flórez, Procurador General de la Nación
Carlos Alfonso Negret, Defensor del Pueblo
Juan David Vélez, Representante de los colombianos en el exterior
