Doctora GINA MARIA PARODY D'ECHEONA
Ministra de Educación
Doctora CLARA LOPEZ OBREGON
Ministra del Trabajo
Señores CONSEJO SUPERIOR
Universidad del Magdalena
Ref. Garantías para el personal Contratista, Catedráticos y Empleados Públicos de la Universidad del Magdalena.
Cordial Saludo,
Uno de los problemas que más ha afectado el trabajo en Colombia es el de la tercerización laboral: forma de esclavitud moderna que se ha venido imponiendo en la totalidad de las empresas del Estado, con el único fin de contar con mano de obra calificada a bajo costo. En efecto en nuestro país esta modalidad laboral ha adquirido distintas formas, cada una de ellas con un nivel de perversidad sin precedentes. Entre estas formas laborales encontramos la contratación por orden de prestación de servicios -tal vez la más utilizada-, el outsourcing, que es la contratación de personas a través de empresas particulares para desarrollar labores de planta -- ejemplo de ello son las empresas de vigilancia y aseo que son las que más demanda el sector estatal--, las detestables cooperativas de trabajo asociado en las cuales el trabajador se convierte de manera aparente en su propio patrón, y, por último, el contrato sindical en el cual convierten a los sindicatos en empresas que prestan servicios en sus entidades, desnaturalizando así las organizaciones gremiales que defienden derechos y garantías para convertirlas en patronos.
La idea de todas estas terribles formas de contratación es ni más ni menos que quitarle a los patronos la responsabilidad de la carga prestacional, ya que los salarios que se pagan terminan siendo salarios integrales, con el adicional de que es el contratista quien debe pagar su propia seguridad social. De igual manera, por la vía de la tercerización, se logran niveles de eficiencia insospechados ya que los contratistas jamás podrán saber cuál es su horario de entrada y de salida, y sí que menos su jornada de labor semanal, pues son estas personas las que terminan laborando festivos y dominicales so pena que de no aceptar estas condiciones de trabajo, obviamente no se les contrata. Además, los contratistas son una fuente inagotable de clientelismo y de posibles votantes para cualquier contienda electoral ya que por lo general su trabajo se lo deben a toda suerte de nominadores al interior de las entidades del Estado. Por último -- y tal vez la condición que más le gusta a los patronos-- la imposibilidad de organizarse sindicalmente para exigir condiciones decentes de labor, aunque por fortuna hoy en el país son cada vez más los trabajadores tercerizados que hacen uso de la afiliación sindical.
La Universidad del Magdalena no es ajena a este tipo de contratación perversa que se ha magnificado como estrategia de financiamiento en la que se ahorran costos y se consigue clientela, lo que es claro es que por el carácter de las Universidades, este tipo de contratación debería tener una forma distinta en el trato hacia estas personas, pero la realidad nos dice que es en estas instituciones de educación superior donde se alimenta y se hace aún más bárbara esta modalidad de trabajo.
Hoy SINTRAUNAL y SINTRAUNICOL, organizaciones sindicales que con presencia en la Universidad del Magdalena, hacemos referencia a esta situación, dado la renovación actual de los contratos por dos meses (julio — agosto) a los compañeros que laboran bajo esta modalidad, justo ad-portas de una nueva elección rectoral que se realizará en los próximos meses, lo que nos lleva a pensar que es posible que se esté intentando una forma de presión para buscar un respaldo electoral dirigido a apoyar la candidatura de la administración. Consideramos que esto es completamente inaceptable y abusivo el pretender condicionar la contratación a un interés particular en época pre electoral, ya que estos compañeros deberían contar con las mínimas garantías para realizar sus actividades.
Al igual que los compañeros contratistas, el personal de planta y los catedráticos, son víctimas de presiones a cambio de darles continuidad a su contrato, por lo que deben dar su apoyo al candidato de la administración.
Nos negamos a creer que en esta institución se recurra a este tipo de prácticas insanas para la democracia, causando un daño irreparable a la comunidad universitaria.
Nuestro llamado entonces es a que el Concejo Superior y la Rectoría del Doctor Escorcia tomen las medidas necesarias para que los contratistas, catedráticos y empleados públicos cuenten con las garantías necesarias para desarrollar su labor, libres de presiones indebidas y bajo el principio de la transparencia.
Atentamente,
Original firmado
Por la Junta Directiva Nacional Por la junta Directiva Universidad del Magdalena JUAN CARLOS ARANGO MANUEL ENRIQUE TABORDA SALAZAR MARTINEZ
CC: 793.326.002 de Bogota CC: 12.548.449 de Santa Marta
Presidente Nacional Presidente SINTRAUNICOL