Se repite la historia con usted, señor Robledo, quien ya tiene gran parte de responsabilidad por el retorno de los desplazamientos forzados, violencia y miseria en general que vive actualmente el país, al haber orientado a su electorado, hace cuatro años, en contra de Gustavo Petro, favoreciendo así a Iván Duque, tal como lo hace nuevamente con sus salidas en falso, beneficiando a alias Fico más que a Sergio Fajardo.
Usted, avezado en el uso de los recursos que la teoría de la argumentación pone a disposición, ha hecho público un análisis perverso, lleno de veneno, tergiversaciones y falacias, sobre el evento ampliamente conocido de La Picota y su relación con el tema del Perdón Social propuesto por Gustavo Petro, en el que deja entrever sus claras intenciones de perjudicar a éste y no de esclarecer hechos. Por fortuna la verdad sabe darse paso hacía la luz, dejando en evidencia las perversas intenciones que le asiste a muchos en sus comentarios, entre ellos de usted.
Ya ni la prudencia hace parte de sus virtudes, solo queda un ser instintivo e irracional, que termina haciendo el juego a un establecimiento corrupto, por su visceral odio a quien representa hoy día las verdaderas ideas progresistas en este país; o será acaso que siempre fue usted, como afirmaban algunos en los pasillos, un "liberal" de día pero "conservador" de noche (y vaya a ver todo lo que se puede hacer de noche)
Usted que en el pasado fue motivo de orgullo para muchas personas como yo, que lo consideramos presidenciable. Se ha alineado del lugar equivocado; ojalá no tengamos que llorar durante cuatro años más nuevas masacres, desplazamientos forzados, miseria, e inclusive, en un tiempo más cercano, un nuevo magnicidio, ello gracias al flaco favor que le hacen a la democracia personas como usted, con posiciones que, contrario a lo que quieren exhibir públicamente, solo sirven para fortalecer un régimen totalitario, autoritario, despótico y criminal como el existente.
Ya es hora de que reconozca su auto-derrota, que ha sido causada por sus continuos desaciertos, que empezaron, precisamente, con el apoyo casi incondicional que dio a los hermanos Moreno Rojas en su momento (condenados hoy día por corrupción) y que selló con broche de oro con su irresponsable decisión de hace cuatro años, la que contribuyó al remozamiento de Álvaro Uribe en la figura de Duque, con todo lo que ello ha implicado en sufrimiento para el país; ¿o acaso porqué cree que le fue tan mal en las pasadas elecciones?
Esperemos rectifique su rumbo porque como va, tal parece, lo estaríamos viendo de plácemes al lado de Alvarito, abiertamente queriendo cantar una nueva victoria para este.