Liderados por los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, el Cartel de Cali fue la gran fuerza criminal de los años 90 junto con el Cartel de Medellín —con quienes fueron socios hasta 1987 en el negocio de exportación de cocaína, momento en que un lío de faldas escaló y escaló y acabó con la alianza—.
Los de Cali, más adeptos a la extorsión que a los bombazos (como tanto gustaba a Pablo Escobar) colideraron ese negocio que los volvió amos y señores de gran parte del país. Se dice que en su momento de apogeo, el Cartel de Cali controlaba el 70 % del mercado mundial de cocaína.
Tres décadas después, muertos o encarcelados todos o casi todos los protagonistas de ese monstruo de dos cabezas, su poder todavía puede verse en los coletazos que llegan hasta nuestros días.
Los miembros del Cartel de Cali (que incluían a José ‘Chepe’ Santacruz, Hélmer ‘Pacho’ Herrera, Víctor Patiño Fómeque y Phanor Arizabaleta y muchos otros) mandaban en la ciudad y fueron muchos los inmuebles y lotes valiosos que compraron pues tenían información de la lonja de propiedad raíz y sus inversiones estuvieron siempre muy bien orientadas en predios urbanos con vocación para valorizarse.
Mansiones en Ciudad Jardín, el barrio residencial suburbano de prestigio social, fueron puntos de su mayor interés, con casas representativas que terminaron en manos de estos capos, como la réplica del Club Colombia que levantó José Santacruz como reacción a la negativa de poder hacerse socio del club del mismo nombre.
Periodistas realizaron un recorrido por la mansión de Chepe Santa Cruz que hizo a imagen y semenjandaza del prestigioso club y que fue expropiada por las autoridades en 1996.
Por otro lado, el famoso Club San Fernando (nombre inspirado en famoso porro de Lucho Bermúdez) terminó en un pleito de mafiosos que terminaron destruyendo la casona donde estaba la pista de baile, epicentro de las Ferias de Cali, pero el lote lo expropiaron las autoridades y quedó en manos de la entonces Dirección Nacional de Estupefacientes convertida hoy en la Sociedad de Activos Especiales.
El gobierno de Iván Duque se lo entregó en comodato al alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, quien lo destino para construir el Parque Tecnológico San Fernando, un epicentro de ciencia e innovación, que le otorgará su inauguración al alcalde Alejandro Eder.
Fue un Club , el San Fernando , lo tomó el narcotráfico y lo demolió , durante años un escenario inerme un monumento al crimen , llegamos nosotros , recuperamos el lote ( compramos ) y construimos un Centro de Ciencia y Tecnología " Imaginario , San Fernando " lo hicimos con… pic.twitter.com/kXikK3Jauo
— Jorge Ivan Ospina (@JorgeIvanOspina) February 2, 2024
La joya de la corona: el lote de 4 hectáreas que se inaugurará en la COP16
Pero la verdadera joya de la corona es un gran lote de 8 hectáreas localizado en el área de la Plaza de Toros, frente a Cosmocentro, donde actualmente se ubica la carpa La 50, que va desde la calle 5ta hasta frente al Hospital de Siloé.
Este es un predio que según estimaciones estaría avaluado en 123 mil millones de pesos. Un lote que era propiedad de Pacho Herrera, tercero al mando de la organización y quien fue asesinado en la cárcel de su natal Palmira en 1998.
La Dirección Nacional de estupefacientes se lo expropió a Herrera en 1996 y lo intervino la DNE en 2006. Luego, en 2008, el empresario de eventos Carlos Paz lo tomó en su condición de depositario provisional de la SAE. Paz fue el creador de la famos de la Carpa la 50, La 66 (Central Park) y de Carpa Feria la 14 de Calima. Un negociazo que explotó durante 15 años hasta que el año pasado lo incautó la SAE.
La suerte del lote como parque ambiental para Cali
Es este el mismo lote el que ahora el presidente Gustavo Petro ha decidido transformar en un gran Parque Ambiental con instalaciones para proteger y promocionar aún más el cuidado de la vida y el medioambiente y que será presentado al mundo en el marco de la COP16, la esperada cumbre mundial sobre biodiversidad a realizarse en la última semana de octubre en Cali.
Sobre la COP16 el consenso es claro: desde los Juegos Panamericanos de 1971, la ciudad no era protagonista de un evento de estas dimensiones, pues el encuentro es una cita para la discusión y negociación mundial sobre el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) de las Naciones Unidas. Por eso muchas manos están trabajando desde febrero, momento en que el presidente Petro anunció la elección de Cali como sede del encuentro internacional.
Esta decisión de tomar el lote que está a su suerte y convertirlo en lo que se pretende tiene muy contentos a los entendidos en la materia, y cobra mucho sentido sobre todo ante la tugurización del sector por la construcción de un centro comercial en los antiguos parqueaderos de la Plaza Cañaveralejo. El gran parque se contempla como un bosque urbano con lago y senderos para las actividades deportivas y protección de flora y fauna.
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Así entonces, de ser una adquisición de Pacho Herrera y los miembros del Cartel de Cali, el lote pasará a ser una de las joyas de la corona que Petro quiere mostrar a los visitantes de la Sultana del Valle. Lograr esto viene siendo posible por la gestión de la Sociedad de Activos Especiales: de Sebastián Caballero, que es la cabeza jurídica de la misma, y del actual MinEducación, Daniel Rojas (quien estuvo liderando la entidad hasta mayo pasado).
Asimismo, tiene mucha responsabilidad la ministra de Medio Ambiente, Susana Muhamad. Muhamad no solo tiene méritos en las gestiones propias de lote reconvertido en eventual parque sino que esa clave en todas las movidas de la COP.
Luego de años de olvido, fue en la alcaldía de Jorge Iván Ospina que este lote fue declarado como predio de utilidad pública ya con vistas a este propósito, y en las primeras conversaciones con el presidente Petro, este se comprometió en el objetivo. Labor en la que ha sido clave el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (DAGMA), entidad que lidera Francy Restrepo Aparicio, y con quien ya se tienen adelantados estudios y diseños para el parque cuya apertura se espera a inicios de noviembre.
¡Atención! Recuperamos el predio Carpa la 50 en la ciudad de Cali.
— Sociedad de Activos Especiales (@activosSAE) February 2, 2024
Hoy fue notificado el dueño de la carpa para la entrega voluntaria o el desalojo que sería el 14 de febrero. Posteriormente iniciaremos las acciones judiciales para cobrar 1'400 millones que le adeuda a la SAE. pic.twitter.com/cdYIpXYSbS
Al alcalde Alejandro Eder le corresponde otro pedazo de la historia, pues tiene bajo su mando el Plan de Desarrollo en el que está contemplada la transformación del lote y la responsabilidad de dejarlo como patrimonio. Es a Eder al que le tocó el final feliz de un predio que de manos de capos del Cartel de Cali, se transforma y sirve como símbolo del cambio de los tiempos en la ciudad y de las labores encaminadas a mostrar a la ciudad y al país como líderes en temas de biodiversidad, transformación y reconciliación.
Será Petro el que seguramente corte muy orgulloso la cinta inaugural para entregar el parque que fue de la mafia, se quedó en el olvido y hoy vuelve a figurar, gracias a la cumbre que tiene a Cali corriendo para estar a la altura del histórico encuentro de la COP16.