Carlos Hernán Rodríguez Becerra es un sobreviviente del 11 de abril de 2002 cuando el Frente 30 de las Farc entró armado hasta los dientes a la Asamblea del Valle del Cauca y secuestró a 12 diputados mientras un vigilante, un camarógrafo y un conductor eran asesinados a las afueras.
En 1995 Carlos Hernán se lanzó por primera vez a un cargo de elección popular: el Concejo de su natal Palmira, cargo en el que se mantuvo durante dos periodos hasta convertirse en diputado de la Asamblea Departamental. Ese 11 de abril de 2002, horas antes de que iniciara la plenaria avisó a sus compañeros que se ausentaría; su hijo mayor estaba enfermo y a última hora decidió llevarlo de urgencias al hospital mientras sus colegas eran secuestrados.
El 18 de junio de 2007 se conocería que habían sido ejecutados. Durante esos años de zozobra, Carlos Hernán se convirtió en el paño de lágrimas de las familias de sus colegas y en el bastión de esperanza para los Barragán acercándose especialmente a Adriana María y Manuel Felipe, hermanos del diputado Carlos Barragán quien después de ser empresario se metió a la política siguiendo el legado político de su padre y se unió al movimiento Amigos del futuro para ser parte de la lista de candidatos a la Asamblea Departamental en el 2000.
El hijo del diputado Carlos Barragán solo tenía 4 meses cuando secuestraron a su papá. Foto crédito: CNMH
Adriana María Barragán, esposa del ministro del Interior Alfonso Prada, se comunicaba casi a diario con Carlos Hernán, juntos recordaban a Carlos quien había dejado a un hijo de solo cuatro meses al momento de su secuestro. Era un amante de las rancheras, baladas y el rock, un fanático de Gabriel García Márquez que disfrutaba como nadie de un asado cada domingo.
Adriana Barragán, hermana del diputador Carlos Barragán y esposa del ministro del Interior Alfonso Prada, se acercó a Carlos Hernán Rodríguez cuando sucedió la tragedia
Después de este golpe de suerte, la carrera de Carlos Hernán se disparó. En 2004 llegó a la gobernación del Valle del Cauca de la mano de Angelino Garzón que de inmediato lo nombró como su secretario de despacho. También hubo espacio para Lina María Bedoya, esposa de Carlos Hernán, que hacía de secretaria del gobernador Garzón, pero de Desarrollo Social. Anteriormente, Lina María Bedoya se desempeñaba como gerente del Aeropuerto Santa Ana del municipio de Cartago en la época dura del narcotráfico.
El contralor y su esposa Lina María Bedoya trabajaron juntos como secretarios del gobernador Angelino Garzón
Aunque en el 2006 Carlos Hernán fue nombrado secretario de Planeación, sin duda, en el 2008 contó con algo más que suerte. Se metió a la política valluna, esta vez, adhiriéndose al movimiento ‘Por un Valle seguro’ en el que respaldó a su gran amigo Juan Carlos Abadía y su deseo de llegar a la Gobernación del Valle. Carlos Hernán también se codeaba con el congresista Juan Carlos ‘El Negro’ Martínez. La triada Rodríguez, Abadía, Martínez disfrutó de las mieles del triunfo cuando Abadía se convirtió en gobernador; en ese 2008 Carlos Hernán terminó como Contralor Departamental del Valle.
Las cosas iban viento en popa para Carlos Hernán que tomaba las riendas de los entes y órganos de control, pero algunos escándalos como el de la Licorera del Valle no avanzaban en sus manos; su amigo Juan Carlos Abadía era destituido del cargo por la Procuraduría que lo inhabilitó de participar en política durante diez años. Para ‘El Negro’ Martínez no pudo ser peor: lo acusaron de parapolítica y de ser el cerebro de una 'registraduría paralela' con la que alteró la votación de las elecciones atípicas para la gobernación del Valle en las que resultó electo Ubeimar Delgado.
Sin embargo, Carlos Hernán Rodríguez cayó parado en la Defensoría del Pueblo en el 2012, en la Dirección Nacional del Sistema de Defensa Pública y posteriormente llegaría su cargo más importante: auditor general.
Carlos Hernán Rodríguez es un hombre de suerte, así quedó demostrado cuando en cuestión de 48 horas pasó de ser un candidato a la Contraloría que nunca sonó en el cerrajero para convertirse en el reemplazo de Felipe Córdoba.
María Fernanda Rangel tenía el respaldo de los partidos tradicionales para ser sucesora de su jefe Felipe Córdoba
Le ganó el pulso a María Fernanda Rangel que contaba con el apoyo de conservadores, liberales, Cambio Radical, La U, Centro Democrático y hasta de los representantes de paz. El pasado político de Rodríguez en el Valle del Cauca —en el que se codeó con Roy Barreras, Alexander López y hasta el mismo Prada, vía su esposa, Adriana Barragán— le sonrió cuando se convirtió en el candidato predilecto del gobierno de Gustavo Petro. Bastó con un Roy Barreras moviéndose en el Congreso para que Carlos Hernán se asegurara las mayorías y convenciera hasta a los uribistas de apoyarlo.
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