A pesar de que sus defensores dicen que no estaba generalizando, sino se refería específicamente a su esposa, su discurso es machista y peligroso, ya que demuestra una involución del pensamiento político y social en la garantizacion de los derechos de las mujeres, además del reconocimiento de su papel en la construcción de una sociedad mejor; solo le faltó mandar a trapear a su esposa mientras el participa en la política, como si se tratase de los años cincuenta cuando la mujer no tenía ni voz ni voto en las elecciones y era apta solamente para criar niños y complacer al hombre sexualmente cuando llegaba tarde de trabajar.
Este discurso es peligroso fundamentalmente porque si así trata a la esposa si fuera la primera dama de la nación, ¿cómo tratará a las otras mujeres colombianas al dictaminar políticas públicas y tomar acciones frente a problemáticas sociales, si sube a la presidencia? ¿No será que su discurso contradice totalmente su plan de gobierno que si tiene implícito la participación politica de la mujer y esto lo convierte en alguien mentiroso y peligroso a la vez?