Los campesinos del movimiento Dignidad Agropecuaria, uno de los sectores protagonistas de las recientes protestas, se quejaron por el "carameleo" al que dicen estar siendo sometidos por el gobierno y reclaman el cumplimiento de los acuerdos firmados en el paro nacional agrario. Los productores de café, arroz, papa, cebolla y cacao le enviaron esta carta al presidente Juan Manuel Santos, expresándole su descontento con los representantes del gobierno en las mesas de concertación ya que no cuentan con ningún poder de decisión. Aseguran que el gobierno se ha burlado de ellos al no cumplir con los acuerdos básicos pactados.
Bogotá, septiembre 25 de 2013
Señor Presidente de Colombia
DOCTOR JUAN MANUEL SANTOS CALDERÓN.
La Ciudad
Señor Presidente:
El 6 de septiembre en la ciudad de Tunja, con representantes de los productores de géneros de clima frío, de papa, leche, frutas y cebolla, prioritariamente, y el 5 de septiembre en la ciudad de Neiva, con voceros autorizados de los agricultores del Huila, principalmente cafeteros, delegados de su gobierno firmaron sendas actas de compromisos y acuerdos en negociaciones sectoriales con quienes nos hemos unificado en el movimiento de Dignidad Agropecuaria Colombiana. Igualmente, en mesas de diálogo en Villavicencio, con los arroceros, en Santander, con los cacaoteros, y en conversaciones con paneleros, se han intentado entendimientos en busca de soluciones a la problemática coyuntural de las distintas ramas agropecuarias.
El balance que hoy, luego de 20 días, hacemos del cumplimiento de la palabra empeñada por sus delegados, respaldada en actas debidamente suscritas, con garantes testimoniales, es que no se ha concretado ninguno de los puntos esenciales convenidos y que se ha configurado lo que en el campo llamamos como un “carameleo”, lo cual se demuestra en el bajo nivel jerárquico de los funcionarios que atienden las respectivas negociaciones.
No aparecen los decretos prometidos relacionados con las protecciones comerciales; no se tramitan con la urgencia necesaria las leyes que concreten los apoyos al precio del café para 2014 ni los de los demás productos; ni las atinentes a los distintos alivios crediticios pactados, ni siquiera se ha reajustado el alicaído presupuesto para el agro para el año entrante; y, usted lo sabe, en un tema fundamental, el precio de insumos y fertilizantes, su gobierno tomó el camino de adoptar medidas inocuas que se presentan ante la galería como trascendentales pero que son una burla a un justo reclamo de los más de 2,5 millones de productores del campo.
A lo anterior, adicionamos que las declaraciones del nuevo Ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, al periódico virtual El Pueblo, de Cali, quien afirma que “no es amigo de los subsidios” y le introduce un factor de desconfianza frente a la honra que el Gobierno hará de los compromisos debidamente convenidos.
Por consiguiente, queremos manifestarle, en primer lugar, nuestra inconformidad por el desarrollo que está teniendo el proceso de concreción de los acuerdos y, en segundo término, la decisión de que, de continuar las cosas de este modo, nos veremos liberados de nuestra parte y obligados a consultar a nuestras bases sobre la conducta a seguir al ser burlados. Entendemos que se requiere un tiempo prudencial para implementar las medidas concernientes pero, al ritmo que los despachos oficiales llevan, está seguro el fracaso.
De Usted atentamente,
Dignidad Agropecuaria Colombiana