“Nosotros hemos sido agricultores de papa por tradición. Toda la vida nuestros padres, nuestros abuelos se han dedicado al cultivo”, cuenta Rosa Elvira Rivera, una mujer campesina que dice que heredó su amor por el campo de sus padres y por esa razón disfruta trabajar labrando la tierra.
“Amo el campo, he tenido la oportunidad de poder irme a buscar otras oportunidades, pero las mejores oportunidades están aquí en el campo porque es donde nosotros nacimos, donde crecimos y donde tenemos una mejor calidad de vida”, reafirma.
Hoy, esta mujer y 46 familias más, conforman una asociación con la que para mejoran su economía y es un ejemplo para los más de 11 millones de campesinos que tiene el país.
“Nosotros como cooperativa estamos constituidos desde hace seis años. Nos dedicamos al cultivo de papa y también a la producción de leche y también a la de varios cultivos alternos de clima frío del municipio de Ventaquemada, Boyacá”, explica sobre su asociación, que ha recibido el apoyo del Programa Integral de Intervención de la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarias (UAEOS), con el que se han fortalecido y que les ha permitido comercializar productos de calidad, que también les sirve para el consumo familiar.
Rosa está tan feliz con su asociación y con la ayuda de la UAEOS que invita a sus colegas campesinos a capacitarse de forma constante. “Tenemos que capacitarnos, tenemos que estar gestionando proyectos para nuestras organizaciones, tenemos que estar buscando una mejor calidad de vida para todos nosotros, un mejor bienestar”.
La UAEOS es una entidad del Estado, adscrita al Ministerio del Trabajo, que en sus programas fomenta y fortalece las estrategias de emprendimiento de campesinos de las comunidades rurales más vulnerables del país, para que puedan generar trabajo decente e ingresos dignos y generar una transformación económica en estas familias.
Con estos programas, el trabajo de la UAEOS no solo invierte en hogares campesinos como el de Rosa, sino también con los emprendimientos de pequeños comerciantes informales, para que puedan asegurarse un ingreso económico, garantizando su seguridad alimentaria, el acceso a seguridad social y en general el mejoramiento constante de su calidad de vida.