Con mucha alegría y felicidad celebro la noticia de la decisión de la Corte Suprema de Justicia, la cual absolvió y le otorgó la libertad inmediata al líder indígena del Norte del Cauca, Feliciano Valencia, quien ha aportado gran parte de su vida a la construcción de un país que reconozca los derechos autonómicos de los pueblos indígenas, y para que el Gobierno respete y reconozca la cosmovisión, la ancestralidad, las tradiciones, costumbres y las culturas de los diferentes pueblos indígenas que hay en Colombia.
Con este artículo completo 13 escritos sobre Feliciano y la Guardia Indígena, y lo escribo con mucha felicidad, pues la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia con esa decisión, marca un precedente en materia del respeto y reconocimiento de la Jurisdicción Especial Indígena, así como de los derechos autonómicos indígenas, ya que la Sala de Casación consideró que durante los hechos ocurridos para el año 2008 en la Finca La María, Feliciano actuó en el marco de su autoridad indígena.
Pero además, esta decisión no solo es un triunfo para la autonomía de los pueblos indígenas, también es un mensaje hacia el Gobierno y la clase política a la cual le incomodan los pueblos indígenas, y el mensaje es claro: el Gobierno y los políticos no pueden pasar por encima de los pueblos indígenas, ni de sus voceros y autoridades, como tampoco pueden pasar por encima de los líderes sociales, que en los últimos años han sido objeto de persecución.
Recordemos lo que ha hecho Feliciano a lo largo de su vida, como la difícil situación que tuvo que vivir, empezando con la arremetida del programa “Séptimo Día” del Canal Caracol, que posteriormente se agravó con la orden de captura del Tribunal Superior de Popayán, y la posterior reclusión y condena.
Feliciano Valencia Medina es líder indígena nasa del Norte del Cauca, cuya trayectoria ha sido de las más destacadas y reconocidas del país. Valencia fue Gobernador Indígena durante los años 90 del resguardo Munchique Los Tigres, para el año 2000 obtuvo el premio nacional de paz, gracias a su lucha y resistencia, en donde le inculcó a los territorios indígenas la paz y la armonía, labor que lo destacó en el Norte del Cauca.
En el año 2004, Feliciano fue elegido coordinador de la Guardia Indígena, una de las mayores responsabilidades de su vida al interior de los pueblos indígenas. Hasta la UNESCO condecoró a Feliciano con el título de maestro de vida, y es considerado por varios líderes sociales y autoridades indígenas como “el caminante de la palabra”, debido a sus destacadas participaciones en las mingas de los años 2006 y 2008. Estuvo en la Consejería Mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) en los años 2007 y 2009. Feliciano ha integrado el equipo de paz de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN).
Todo empezó con dos programas “especiales” de Séptimo Día, llamados: “¿La corrupción llegó a los cabildos indígenas?”, programa en el cual se señalaban a varias organizaciones indígenas de ser aliadas y colaboradoras de la guerrilla, así como una supuesta relación de Feliciano Valencia con la insurgencia, sin embargo tanto las organizaciones indígenas como Valencia nunca tuvieron dichas relaciones como lo aseguraba ese programa de televisión, que además hizo esas afirmaciones sin ninguna prueba ni sustentación jurídica.
El hecho podría haber quedado ahí, y el estigma de los medios de comunicación masivos y tradicionales como Caracol TV hacia los pueblos indígenas podría seguirse expandiendo y haciendo eco en el país, sin embargo, por fortuna para la opinión pública y la inocencia de Feliciano y de las organizaciones indígenas, la Corte Constitucional le ordenó a Séptimo Día rectificar en favor de los pueblos indígenas, como del buen nombre y la honra de los mencionados en esos dos especiales.
Luego de los programas de Caracol TV, a los pocos días el Tribunal Superior de Popayán expidió una orden de captura contra Feliciano, el martes 15 de septiembre del 2015, en donde la Fiscalía capturó a Valencia en La Agustina, Cauca, posteriormente se le realizó la audiencia a Feliciano en la cual se le condenó a 18 años de prisión, en segunda instancia por supuesto “secuestro” a un soldado del ejército.
Realmente lo que sucedió fue que el soldado se infiltró en un resguardo indígena, en donde se desarrollaba una Minga Indígena llevada a cabo en la Finca La María en el año 2008, y fue la Guardia Indígena la que identificó y retuvo al soldado, el cual estaba armado y de civil, y que inicialmente negó ser militar.
La Guardia Indígena decidió hacer un juicio al soldado por su falta, las autoridades indígenas presentes en la Minga deciden que Feliciano sea el coordinador de la audiencia, y es por ello que es a Valencia al que la justicia ordinaria le abre el proceso, posteriormente le da captura y le condena a 18 años de prisión, en el centro de reclusión San Isidro en Popayán.
En octubre de 2015, las autoridades indígenas le habían solicitado al Tribunal Superior de Popayán el traslado de Feliciano al centro de armonización Gualanday, aunque el Tribunal había aceptado, el abogado del militar apeló esa decisión, demorando y dilatando el traslado de Valencia a Gualanday.
Tras un mes de la apelación del abogado del militar, el Tribunal de Popayán le concede el traslado a Feliciano al centro de armonización Gualanday, esta decisión se dio el 5 de noviembre del 2015, y al siguiente día ya se estaba trasladando a Feliciano a Gualanday, en parte esta decisión se dio porque la vida de Valencia corría peligro al interior de la cárcel San Isidro, pues ya había recibido varias amenazas.
No habían pasado ni 15 días del traslado de Feliciano a Gualanday, y ya atentaban contra su vida, el hecho ocurrió el lunes 17 de noviembre del 2015, en donde cuatro individuos con armas largas realizaron varios disparos hacia Gualanday e intentaron ingresar al centro de armonización.
Gracias a la oportuna reacción de la Guardia Indígena se evitó que la vida de Feliciano se pusiera en riesgo. Recordemos que dentro de las funciones de la Guardia está: alarmar, controlar, defender, proteger y vigilar los territorios indígenas, como también velar por la defensa de los derechos humanos, los guerreros milenarios se consideran como un mecanismo de resistencia civil.
La Guardia Indígena hace presencia en asambleas, marchas, eventos de la comunidad, a lo largo de los resguardos indígenas, y en los sitios sagrados.
El 24 de noviembre del 2015, unos días luego del atentado a Feliciano, la Minga Indígena decide viajar hacia Bogotá, con el fin de protestar pacíficamente tras el atentado y la privación de la libertad de Valencia, y exigiendo la liberación inmediata del líder indígena.
El 23 de diciembre del 2015, la Corte Suprema de Justicia aceptó estudiar el recurso de casación interpuesto por el abogado de Feliciano, Germán Pabón, contra la condena de 18 años a Valencia. Y durante el año 2016 se llevaron a cabo las audiencias de sustentación, en donde a una de ellas, llevada a cabo en Bogotá, asistieron varios indígenas provenientes del Cauca, llenando las calles que rodeaban al Palacio de Justicia, todo por apoyar a su compañero y para exigir su liberación.
Aunque el panorama y la situación de Feliciano no era la mejor, el 28 de junio del 2017, la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia concedió la libertad a Valencia así como su absolución, al considerar que “la justicia ordinaria, al condenarlo en segunda instancia, desconoció que la Constitución de 1991 le da un amparo especial a las comunidades indígenas para que desarrollen su propia justicia dentro de sus resguardos. La Corte recordó que en el primero y el séptimo artículos de la carta política se reconoce la diversidad étnica y cultural del país para, precisamente mantener la armonía social, propender por la convivencia pacífica o de baja conflictividad y fortalecer la democracia”. (Tomado de http://www.elespectador.com/noticias/judicial/las-razones-de-la-corte-suprema-para-absolver-feliciano-valencia-articulo-700521)
Tras la captura de Feliciano en el 2015 inicié una campaña en Twitter llamada @FelicianoLibre con los HT #FelicianoLibre #FelicianoValenciaLibre y en Facebook Feliciano Valencia Libre, con el fin de que los colombianos apoyaran la difícil situación por la que atravesó este líder indígena, la cual no fue nada fácil, pero que por fortuna ha llegado a su fin, y ha dejado a Valencia con la frente en alto, libre y absuelto.
Por lo anterior, la campaña ha llegado a su fin y la última acción de esta fue en las horas de la noche del pasado miércoles 28 de junio de 2017, en donde hicimos tendencia en Twitter, gracias a la colaboración de Paz A La Calle, Darwin Torres, Cesar Pachón y la ONIC, con el HT #FelicianoEnLibertad para celebrar con alegría la liberación y absolución de nuestro apreciado Feliciano.
El gobierno debe respetar la jurisdicción especial indígena y los derechos autonómicos, la liberación de Valencia es un paso más para el reconocimiento y la autonomía de los pueblos indígenas de Colombia. Recordemos a los líderes sociales que están privados de la libertad de manera injusta, y a los miembros de los movimientos y organizaciones sociales que han sido víctimas de los denominados “falsos positivos judiciales”.
¡No están solos!
