Colombia, como muy bien es conocido por todos, es uno de los países con altos niveles de contaminación por mercurio. Por ello adelanta acciones con miras a la sustitución de este mineral. Pues bien, la Ley 1658 de 2013 está apegada al convenio Minamata, cuyo objetivo principal es prohibir y erradicar el mercurio de la minería, por lo que esto sería, según los expertos, una ratificación a los acuerdos establecidos en pro de cumplir con los objetivos de eliminar este químico.
Esta iniciativa intenta "que el país se acoja a este tratado internacional, que busca proteger la salud humana y el medio ambiente de las emisiones y liberaciones del elemento químico”. Cabe recordar que Colombia libera 80 toneladas de mercurio al año, por tanto, se encuentra en el primer lugar por contaminación per cápita en el mundo a causa de la actividad minera ilegal y su afectación en los ríos, además que no cumple con prácticas ambientales y sociales adecuadas.
Se debe destacar que la minería de oro que se realiza en más de 15 departamentos es nociva, porque esta actividad se ejecuta de manera ilegal, debido a que sus prácticas no van de la mano con el medio ambiente por la utilización de mercurio. Remedios y Segovia son los municipios de Antioquia que representan el mayor índice de esta actividad ilegal, ocasionando daños graves. También detrás de todas estas operaciones ilícitas se esconde una problemática social que pocos conocen como bandas criminales, prostitución, tráfico de personas, daños de ambientales irreparables, pero de las que sí está enterado el presidente de la mesa minera, Eliober Castañeda.
Recordemos que Castañeda es uno de los máximos líderes de los mineros en Antioquia, quien promovió un paro de 42 días el año pasado, provocando pérdidas millonarias de las cuales los municipios Segovia y Remedios aún no se han recuperado. Imagínense entonces si se ejecuta otro paro con la entrada en vigor de esta ley, no solo se vería afectada la minería legal sino también sería un duro un golpe a la economía, que generaría pérdidas incomparables.
Ser minero artesanal no implica necesariamente que tiene que ejecutar este proceso de manera clandestina, ya que en Colombia hay muchas minas artesanales certificadas, así como también operaciones con inversiones millonarias de compañías que tienen los derechos para extraer oro y lo hacen de manera responsable sin usar este mineral que tantos daños causa.