El atraso en el que se encuentra la Organización Comunal en el municipio de Cereté es consecuencia de los mismos de siempre que se han creído dueños y señores del ejercicio comunal durante varias décadas. He allí la razón esencial del fracaso de ASOCOMUNAL. Por eso, llegó el momento de destronar a esos mismos que cada cuatro años venden la dignidad comunal al mejor postor y a cualquier precio.
El concepto comunal va más allá de sentir y pensar en colectivo. El sociólogo colombiano propulsor de las agremiaciones comunales, Orlando Fals Borda, en su “Carta-Testamento” redactada en 2008, año de su muerte, resaltaba la necesidad de tejer a Colombia desde las JAC (Juntas de Acción Comunal) ahora llamadas OAC (Organización de Acción Comunal), e invitaba a las generaciones futuras a llevar la bandera de las transformaciones sociales que requiere nuestro país.
Reafirmaba “El esfuerzo de reconstruir nuestra sociedad y el ethos de tolerancia y paz queda ahora en las manos y en los corazones de las nuevas generaciones, que veo más aptas, liberadas, informadas e imaginativas que la mía. Las guerras, la intolerancia, la estulticia gobernante deben terminar en esas buenas manos”.
Ese "ethos" es el que ha faltado en estos seudolíderes que durante décadas se han perpetuado, haciendo uso de un sinnúmero de triquiñuelas, en la mesa directiva de ASOCOMUNAL.
A esos señores y señoras de los que hablo, todos en Cereté y sus alrededores los conocen. De modo que, no hace falta mencionarlos aquí, en este artículo de opinión que pretende mostrar objetivamente la realidad del ejercicio comunal para llevar una reflexión y transformación efectiva.
A pesar del interés que ha mostrado el actual presidente Alfonso Spath Bruno, durante su periodo de mandato, el atraso es muy evidente. Pues es apenas obvio, limpiar un camino largo que lleva décadas sucio, es una tarea titánica y más si los que te acompañan no llevan un ritmo constante y no quieren avanzar.
Escuchar las anécdotas de cómo se manejaba antes la organización comunal es espeluznante, nadie quería soltarla y para sostenerse en ella comprometían a los presidentes y delegados de las JAC a cambio del papeleo que se requeriría ante la oficina de Participación Ciudadana en la Gobernación de Córdoba.
Luego, para reelegirse en la mesa directiva de ASOCOMUNAL ya tenían la mayoría electoral a su favor. No siempre contaban con tal concertación, pues a veces se turnaban en el poder como aquel vergonzoso Frente Nacional colombiano donde los liberales y conservadores se dividían el poder cada cuatrienio; "cuatro años tú y cuatro años yo".
De esa forma se mantenían en el poder y los líderes de cada barrio sometidos, subyugados y en el rezago creyendo que esos señores eran las lumbreras del saber comunal, cuando en realidad se distanciaban tanto del "Ethos" al que hacía referencia Fals Borda.
El sábado 26 de junio hubo asamblea general en las instalaciones del Club Campestre, con el fin de constituir el tribunal de garantías, un órgano de tres personas, que de manera transparente llevará por buen camino el proceso eleccionario de la nueva mesa directiva de ASOCOMUNAL. Aunque, no se supo con claridad si todos los asistentes eran en verdad los nuevos presidentes y delegados de las cerca de 120 juntas existentes en Cereté, el tribunal fue escogido.
Por tales razones, mi propuesta hacia la transformación de ASOCOMUNAL implica desarrollar tres ejes fundamentales:
- El primero es el de la educación o cualificación. Las OAC están extendidas por toda la geografía Nacional y son parte de los mecanismos ciudadanos para la participación que el Estado social está en el deber de promover como lo establece el artículo 103 de la Constitución Política del 1991: “El Estado contribuirá a la organización, promoción y capacitación de las asociaciones profesionales, cívicas, sindicales, comunitarias, juveniles, benéficas o de utilidad común no gubernamentales, sin detrimento de su autonomía…” así pues, una manera de empoderar a cada líder comunal es brindarles las herramientas teórico-prácticas para que orienten su ejercicio.
- La nueva Ley comunal 2166 expedida el 18 de diciembre del año pasado, permite a los dignatarios solicitar programas técnicos, tecnológicos y profesionales ante las instituciones de educación superior como el SENA, ESAP, UNAD o cualquier universidad pública, de manera gratuita. En este sentido, se debe primero profesionalizar el ejercicio comunal, aunque suene descabellado, permitirá una mayor acción colectiva, solidaria y emancipadora de los nuevos líderes, en aras de la construcción de un mejor país.
- Y, segundo, crear la primera Escuela de Formación Comunal del municipio y creo que del departamento de Córdoba, para que los que desean hacer parte de las JAC puedan iniciar su carrera comunal. En alianza con los consultorios jurídicos de la Universidad de Córdoba y la Pontificia Bolivariana se pueden iniciar esos procesos de aprendizaje, ¿Cómo es posible que un líder Comunal de un barrio o vereda de Cereté, tenga que pagar para hacer un derecho de petición o un acción popular a un abogado? ¿Cómo es posible que no exista un banco de proyectos comunales en el municipio? O ¿Cómo es posible que desde las JAC no se sepa formular o ejecutar un proyecto? Esos saberes son intrínsecos a la práctica comunal.
- El segundo eje tiene que ver con la estructuración de las JAC, aún existe un número significativo de organizaciones que no cuentan con los requisitos necesarios para postular un proyecto de interés social a las convocatorias que abre el Ministerio del Interior Nacional anualmente. La única JAC del municipio de Cereté que ha participado en dos ocasiones, en el año 2019 y en este 2022, es la del barrio Santa María. Da tristeza que uno vea los resultados de cada convocatoria y del departamento de Córdoba y solo hayan postuladas muchas JAC de Tierralta, Valencia y unas cuantas de otros municipios. ASOCOMUNAL tiene que servir de puente para que todas las JAC de Cereté participen con sus proyectos a todas las convocatorias del MIN o de cualquier otro Ministerio Nacional.
- Finalmente, el tercer eje pasa por tener una infraestructura propia. Actualmente ASOCOMUNAL no cuenta con un lugar específico para realizar las asambleas o las congregaciones que se hacen semestralmente, una sede propia donde los comunales puedan asistir, debatir y divertirse sanamente. Un lugar de esparcimiento o encuentro donde se pueda ejercer el diálogo sobre los temas trascendentales del municipio. El movimiento comunal ha estado en posiciones de poder a nivel local y nunca se pensó en tener una sede propia, ya saben, primaba los intereses personales.
Con estos tres ejes desarrollados, ASOCOMUNAL será un organismo moderno, empoderado y preparado para ser protagonista principal en las transformaciones sociales que se empezarán a realizar durante periodo presidencial de Gustavo Petro Urrego. Invitamos a todos los presidentes y delegados de las JAC de Cereté a unirse a este equipo de trabajo que quiere el cambio para ASOCOMUNAL.