Cuando recién comenzaba la cuarenta nacional, el pasado 25 de marzo el alcalde de Cali Jorge Iván Ospina y la secretaria de Salud Miyer Torres anunciaron la toma de posesión de la clínica Champagnat, que estaba abandonada durante dos años por la crisis de Saludcoop. El emporio que llegó a atender 5 millones de afiliados en 27 departamentos.
El superintendente de Salud Fabio Aristizábal decidió entregar el manejo local de las ocho clínicas Saludcoop para atender la pandemia que empezaba a mostrar sus dientes en el país. Los alcaldes de Bogotá, Medellín, Cali, Pereira, Santa Marta y Barranquilla recibirían las instalaciones en comodato. La expectativa era poder atender 991 pacientes de hospitalización y 84 en UCI, previendo un aumento de casos críticos en el país.
Daniel Quintero en Medellín, la alcaldesa de Santa Marta Virna Jhonson y Ospina en Cali se tomaron en serio la propuesta. Recibieron personalmente los bienes y se pusieron manos a la obra.
Tres meses después cuando el ritmo de contagio del coronavirus se ha acelerado, el alcalde Ospina estuvo en condiciones de inaugurarla. La rebautizó como Clínica “Unidos por la vida” y se la entregó en administración a la Red de Salud del Oriente E.S.E de Cali, gerenciada por Óscar Ipia López.
La primera fase fue la recuperación física de las paredes, los baños, la instalación de servicios públicos principalmente de la electrificación de toda la planta y la selección de las camillas, colchonetas y equipos médicos que aún pudieran ser aprovechados. A finales de abril empezó el trabajo grueso de conseguir dotación de respiradores, en medio de un mercado que ya se empezaba a saturar de pedidos de distintas partes del mundo.
Así se ven los trabajos de mejora de capacidad de la antigua clínica Saludcoop-Champagnat, cuya posesión fue tomada por la Alcaldía de Cali y con la administración de la ESE del Oriente. pic.twitter.com/fZp1GhRaIE
— El País Cali 📰#ElPaisPaLante (@elpaiscali) April 28, 2020
Después de una inversión de $10 mil millones en infraestructura, $7.000 aportados por la Secretaría de Salud de Cali y $3.000 por la Red de Salud a su cargo, el alcalde Jorge Iván Ospina hizo la reapertura de la clínica “Unidos por la vida” el 6 de julio. El centro de salud, de tercer nivel, cuenta con 26 camas de cuidados intensivos, otras 40 para hospitalización y 45 personas del cuerpo médico. Sin embargo, para que funcione al 100%, Ospina todavía está a la espera de gestionar más ventiladores que serían entregados por la gobernadora Clara Luz Roldán y el Ministerio de Salud.
Con la reapertura de esta clínica serán trasladados los pacientes de la Fundación Valle de Lili, Imbanaco y Clínica del Occidente que tienen la mayoría de sus camas UCI ocupadas. La capital del Valle ha estado entre el 82% y el 85% de ocupación por sospechosos y positivos para COVID-19. El alcalde Ospina, quien además es médico, prevé que los próximos tres meses serán los más difíciles para la ciudad por el pico de contagios. De ahí que la Clínica “Unidos por la vida” entre al sistema de salud para darle oxigeno mientras se consiguen los respiradores escasos pero claves para salvar la vida de los contagiados.
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