El nuevo director Diego Mora, cucuteño de toda la confianza del Ministro del Interior Juan Fernando Cristo, de quien depende la entidad, quiere realizar cambios de fondo en la Unidad Nacional de Protección. El último de la cúpula que faltaba por salir era Alonso Miranda, Subdirector de Protección, Secretario General encargado y mano derecha del saliente director Andrés Villamizar. En la Secretaria General ya fue designado Ricardo López, un abogado que trabajó como Procurador delegado de Facatativá. El cargo de la Subdirección de Protección es clave para la ejecución de un presupuesto de cerca de $500 mil millones cuyo principal propósito es cuidarles la vida a 8000 personas amenazadas por distintos grupos armados ilegales. Alonso Miranda salió cuestionado por un contrato por $400 millones con la firma Net Logistyc para la implementación de un software que nunca funcionó y que propició investigaciones de la Contraloría, Procuraduría y Fiscalía que llevan procesos paralelos por los casos de corrupción en la entidad. El nuevo director no renovará los contratos con las cuatro empresas que alquilan vehículos y prestan el servicio de escoltas con las que se había firmado de forma directa, y abrirá una licitación para unificar los servicios en un solo proveedor.
