Cortázar, el ungido por Borges, alguna vez dijo en una de sus cartas:
“Tuve que vender íntegra mi discoteca de jazz y le aseguro que fue un dolor grande”.
Cuando era un adolescente que escuchaba Charlie Parker y Miles Davies, llegó a mis manos “El perseguidor” (1959), que debe ser el cuento más bello que se haya escrito dedicado al jazz (por un latino). Pero no siendo suficiente declaración a esa música balsámica y mestiza definida por Cortázar “como un árbol que abre sus ramas a derecha, a izquierda, hacia arriba, hacia abajo, permitiendo todos los estilos, ofreciendo todas las posibilidades(…)”, el ungido publicó cuatro años después “Rayuela” (1963) donde refiere más de veinte jazzistas; y “La vuelta al día en ochenta mundos” (1967), giro poético al título de la obra de Verne, para presentar esa diáspora musical de los 60’s donde figuran otros tres (pueden descargar los libros haciendo click en los enlaces).
POPAYÁN Y LAS VELEIDADES POR EL JAZZ
Por allá en el 2003, conocí a Jairo Grijalba Ruíz y a Miguel Ángel Duque, máximos conocedores colombianos de este género, quienes a su vez me presentaron a figuras como Edy Martínez, el gran pianista colombiano de jazz, salsa y latín jazz (La Fania); también a Gerardo Rosales Tambó, notable músico de latín jazz venezolano radicado en Holanda. Con este último compartimos temporadas en la casa del pintor Gustavo Hernández y su esposa la galardonada artista plástica Nelly Salazar.
Blues, swing, bebop y hard bop fueron compañeros en el día a día. Enamorado del jazz, ayudé desde la barrera de los toros a una última edición con Grijalba y Hernández del Festival Iberoamericano de Jazz y Música del Mundo de Popayán (2009), que lamentablemente, por falta de ayuda estatal y de un manejo de recursos más cuidadoso, se extinguió. Terminé obsequiando mi guitarra Fender electroacústica a José Gallegos (quien dictó un soberbio seminario sobre el color de las notas y su emocionalidad puesta al servicio del Marketing) para calmar las aguas. 16 años después, aún espero una disculpa y esa guitarra… Debo aclarar que Hernández nunca tuvo nada que ver con ese impase.
ESPAÑA
En España, gracias a la ilustrísima Sra. Blanca Rosa de Aguilar Poyatos, marquesa de la Vega de Armijo, productora de Los Papelípolas; y José Manuel Perea Gaitán, un ingeniero colombiano educado en Lyon, Fr., tuve la oportunidad de conocer otros músicos increíbles que también se acercaron al jazz como el argentino Fernando Egozcue Folgueras (heredero de Astor Piazzolla, a quien este último le obsequió una partitura) y el violinista armenio Ara Malikian, quienes donaron la música de la película en mención. El quinteto también tenía figuras como Moisés Sánchez, José Luis Rodrigáñez y el argentino Martin Bruhn (y a veces la colaboración del egregio guitarrista flamenco José Luis Montón), compositores e intérpretes ENORMES.
En esta columna, quisiera apoyar a la Asociación Cultural Colombo Suiza SMAC, en cabeza de Andrés Ortíz y Lara Lupi, cuya invitación de jazz es para hoy 1 de junio en Bogotá con una serie de conciertos magníficos, casi gratuitos por creadores, algunos de los cuales han pasado por Berklee College of Music (la mejor academia de jazz del mundo) en su filial catalana:
Bunbury dijo en alguna entrevista que lo más universal que hemos logrado los latinos es la salsa. El Latin Jazz tiene una mezcla entre ambos géneros, pero es un jazz mucho más mulato, zambo y mestizo (más afrocaribeño) y con la incorporación de la salsa, estamos llegando a un jazz más colombiano. Pero creo que aún espera por la percusión del Bunde, los cantos afrodiaspóricos y la incorporación de los vientos andinos.
LATIN JAZZ TRÍO. HOY EN BOGOTÁ.
El Latin Jazz Trío, compuesto por Andrés Ortiz al piano, Juan Sebastián Cardozo al bajo y Daniel Chebair a la batería, tiene un repertorio de canciones del álbum Recordando y otros temas reconocidos del género. La invitada especial de la noche será Flora Ortiz (vocalista).
Andrés Ortiz Villalba. Piano. Compositor. Intérprete. N. en Bogotá, D.C. en 1978. Universidad El Bosque. En 2001, jazz en Barcelona, España (Aula del Conservatori del Liceu, adscrita al Berklee College of Music de Bostón). Participa en diversos talleres de composición e improvisación realizados por Bebo Valdés, Chick Corea y Bobby McFerrin. Actúa en los clubes más reconocidos (Jamboree Jazz Club, Bel-Luna Jazz Club, Cova del Drac, Sidecar, etc.) y forma parte del Festival de la Mercé, Festival de Jazz de Barcelona. Compone para el catalán Manel Barceló. Funda el grupo colombiano Súper Ram y con su esposa Lara Lupi la Academia de Artes de Suiza SMAC (2009) y la Asociación Cultural SMAC en Colombia.
Juan Sebastián Cardozo Restrepo. Bajo. N. el 7 de septiembre de 1978. Escuela del Francisco Cristancho; Universidad Javeriana. Escola de Música Taller de Musics, Barcelona, España. Premio a mejor orquesta Nouvelle en el Festival Tempo Latino (Francia). Acompañó a Andy Montañés, Ismael Miranda y Henry Fiol, Guinea Bissau Mú Mbana (África).
Daniel Chebair. Batería. N. en Bogotá, D.C. 11 de marzo 1983. Cantautor, Productor, percusionista, baterista. Director con más de 20 años de la escena musical Nacional e internacional. Ha trabajado con Monsieur Periné, Pedrina y Rio, La Revuelta, William Maestro, entre otros.
Flora Ortiz Lupi. Voz. Cantante invitada suizo-colombiana. N. en Barcelona. Primer premio en el Kleine Prix Walo 2019 de Suiza. La voz más bella que oirán cantando canciones de Edith Piaf.
Bien decía Frank Zappa, “hablar de música es como bailar de arquitectura”, por eso dejamos aquí una muestra de lo que se oirá esta noche:
Reservas de entradas al WhatsApp 311 282 38 83.
COLOFÓN BORGES-CORTÁZAR
Borges describió decía sobre su relación con Cortázar, que posibilitó que el jazz llegara a uno de los máximos exponentes de la literatura latinoamericana:
“Yo me encontré con Cortázar en París, en casa de Néstor Ibarra. Él me dijo: “¿Usted se acuerda de lo que nos pasó aquella tarde en la diagonal Norte?”. “No”, le dije yo. Entonces él me dijo: “Yo le llevé a usted un manuscrito. Usted me dijo que volviera al cabo de una semana, y que usted me diría lo que pensaba del manuscrito”. Yo dirigía entonces una revista, Los Anales de Buenos Aires (una revista ahora indebidamente olvidada), que pertenecía a la señora Sara de Ortiz Basualdo, y él me llevó un cuento, “Casa tomada”; al cabo de una semana volvió. Me pidió mi opinión, y yo le dije: “En lugar de darle mi opinión, voy a decirle dos cosas: una, que el cuento está en la imprenta, y dentro de unos días tendremos las pruebas; y otra, que ya le he encargado las ilustraciones a mi hermana Norah”. Pero, en esa ocasión, en París, Cortázar me dijo: “Lo que yo quería recordarle también es que ese fue el primer texto que yo publiqué en mi patria cuando nadie me conocía”. Y yo me sentí muy orgulloso de haber sido el primero que publicó un texto de Julio Cortázar. Y luego nos vimos un par de veces en la UNESCO, donde él trabaja. Él está casado -o estaba casado- con la hermana de un querido amigo mío, Francisco Luis Bernárdez […]. Bueno, como le decía, nos vimos creo que dos o tres veces en la vida, y, desde entonces, él está en París, yo estoy en Buenos Aires; creo que profesamos credos políticos bastante distintos: pero pienso que, al fin y al cabo, las opiniones son lo más superficial que hay en alguien; y además a mí los cuentos fantásticos de Cortázar me gustan”.
SMAC también tiene eventos de literatura, teatro, danza, pintura, totalmente gratuitos. Y otros músicos enormes. Alejandro Loaiza (Frailejón). Productores como Maurico Cano, que ha servido en el estudio a grandes compositores como Shakira, Silvestre Dangond, Andrés Cepeda, Claudia de Colombia, entre otros; y percusionistas como Jesús Blanco, gran promesa de la música colombiana, que nos ha demostrado, como lo dijera Nila (Adriana Urrea Vanegas) que el Bunde es el “jazz” del Caribe.
MÁS SOBRE EL LATIN JAZZ
Aquí otra columna que se tejió de la mano de Jairo Grijalba Ruíz sobre el nuevo documental de Edy Martínez.
CONDECORACIÓN
El día 29 de mayo (hace tres días) el maestro Javier Chinchilla Nieto quien expuso su obra en SMAC obtuvo un importante reconocimiento por parte del Congreso de la República de Colombia.
¡Gracias SMAC!