En tiempos del coronavirus debo romantizar la explotación laboral como un acto altruista —aunque, sea más un acto económico—, decirme a mí misma que mi empleo contribuye a mantener el sistema económico y la salud, y que mi labor es importante porque pretende garantizar unos pagos a empleados —y claramente a mí misma— que lo merecen. Así me pienso como una prótesis o como un artefacto que ayuda a dinamizar la economía que hoy se estanca.
La disposición biopolítica de Bogotá, lugar donde trabajo, hace que no sea el mejor lugar para pasar una pandemia. Trabajo en salud, no propiamente en un hospital, pero sí en el área administrativa de una IPS, para mí no hay confinamiento preventivo. En tiempos del coronavirus debo romantizar la pandemia, salir y hacer de mi trabajo un estilo de vida. Además debo amarlo, así esto implique la mercantilización de mi existencia. ¿Dualidades? Sí, todas, intento ser útil, pero tal vez existe un otoño de emociones más grande que hace que me desencante de las dinámicas laborales porque ven la salud como un negocio corruptible y una oportunidad de incrementar los ingresos.
El pasado lunes 06 de abril fue un día caluroso y próximamente tenso. Inicié mi semana laboral a las 08:00 a.m. —pero, casi siempre, llego antes para tomarme un café—. Los sonidos de los teléfonos ya se escuchaban, sus timbres eran tan agudos que hacían resonar los vidrios de la oficina. Luego de tomarme con apuro el café, comencé a revisar el sinfín de correos electrónicos que esperaban ser contestados
A continuación expondré los emails más desgarradores que he tenido en esta experiencia, los cuales son más habituales de lo que quisiera:
Correo 1 de 157
Fecha: Domingo 05 de abril a las 11:59 p.m.
Asunto: URGENTEEE, SOLICITUD DE ENTREGA
Buenas noches, ha sido imposible comunicarme con ustedes, mi mamá tiene 83 años y mi papá 92, debido a las restricciones de la cuarentena a causa del COVID-19 no es posible acercarnos a sus dispensarios, solicito su colaboración con el envió de los pañales de mis padres para el control de sus esfínteres. Esta solicitud es urgente, mis padres ya no tienen pañales, y yo no tengo el dinero para comprarlos, tampoco puedo salir a reclamarlos… Quedo atenta a su pronta respuesta.
Respiro y continuo.
Correo 2 (ahora son 2 de 159)
Fecha: Lunes 06 de abril a las 5:39 a.m.
Asunto: TUTELA, URGENTE ALIMENTACIÓN ENTERAL.
Buenos días, solicito su amable colaboración con el envió del alimento neocate junior para mi hija de 6 meses. Este es un medicamento es esencial para su salud y ella está clasificada como riesgo de vida, debo adminístralo por medio de una sonda. Por favor comunicarse conmigo para saber cómo va el proceso.
Ahora me pregunto, ¿cómo estamos habitando lo cotidiano desde la virtualidad?
Respiro y sigo leyendo.
Correo 3 (ahora son 3 de 164)
Fecha: Lunes 06 de abril a las 5:59 a.m.
Asunto: ¡URGENTE! SANCIÓN DE ARRESTO PARA GERENTES ZONALES
Buen día, cordial saludo, solicito su ayuda con los soportes de entrega de medicamentos para los afiliados relacionados, (adjunto correos con solicitud de los pacientes), con estos soportes se dará respuesta a sanciones de arresto de los gerentes zonales. Esta información se requiere en el menor tiempo posible.
Caso 1: entrega de insumos de colostomía, (en este procedimiento quirúrgico, se saca un extremo del intestino grueso a través de una abertura hecha en la pared abdominal, para que el paciente pueda evacuar heces a través de una bolsa adherida).
Debido a mi intervención quirúrgica por cáncer de colon y mi difícil acceso a las ciudades principales pues, señores, vivo en San Bernardo del Viento, que es una zona rural de alta complejidad, solicito que los insumos de este mes, sean enviados a la oficina principal de la transportadora del pueblo, ya que no me puedo movilizar por la situación que se está presentando con la pandemia COVID-19. Muchas gracias, quedo atento.
Caso 2:
Entrega de ácido valproico para Santander de Quilichao, (el ácido valproico es un fármaco estabilizador del ánimo y anticonvulsivo, está indicado para trastornos bipolares, para la epilepsia y para pacientes con atrofia muscular)
Buenos días, Dios los bendiga. Quiero confirmar el estado del envío del medicamento de mi hermano, ya se le está acabando y hemos disminuido las dosis, en consecuencia, empezó a desarrollar estados de ánimo alterados, no puede dormir y hay días donde emerge la depresión maníaca. Por favor enviar las pastillas, a la oficina principal de la transportadora de Santander de Quilichao.
Pienso: ¡en este tipo de trabajo no solo es necesario hacer una distinción entre emociones y labores, también es una obligación!
Correo 3 (ahora son 4 de 170)
Fecha: Lunes a las 7:15 a.m.
Asunto: PACIENTE FALLECIDO: diagnóstico COVID-19, Chapinero, Bogotá
Buenos días. Es necesario hacer la recolección de la cama hospitalaria, del paciente XXXXX XXXX, por causa de fallecimiento. Por favor contactarse con los familiares, para coordinar la recolección y tener en cuenta que la no recolección puede afectar la salud mental de las personas que viven en la casa, además de ser un riesgo biológico. Muchas gracias, quedo atento.
Este caso es urgente, como todos los demás…
Ese es el perfil pasajero de figuras anónimas que contemplo a diario.
Frases como "trabaja más duro" y "no te detengas" nos perjudican. Bienvenidos a la cultura que celebra el ajetreo sin fin: ¿cuántos pacientes vamos hoy?, ¿cuántos es el estimado para la próxima semana?, ¿cuáles entregas fueron efectivas?, ¿cuál es la meta de venta para este mes?...
Me pregunto: ¿cómo se lucran de historias tristes sin sentir culpa?, ¿cómo dejar de sentir esa profunda desconexión entre las dinámicas de producción y el sentido humano?, ¿dónde está el cuidado de mí, el cuidado al contagio de la pandemia y el cuidado a la sobrecarga laboral?
Hoy me pienso como un número que es prescindible. Tal vez escribí esto como un asunto de resistencia al sistema.