Asistí a la premiación de las Chicas Águila con la ilusión de que después del evento quedaría completamente extasiado y feliz de ver tantas mujeres tan atractivas, pero me pasó todo lo contrario. Quedé triste y decepcionado, no con las chicas (ovejas), sino con el patrocinador (lobo).
Me cuesta trabajo entender por qué una marca tan reconocida y con tanto impacto en la vida de los jóvenes, promueve la belleza que genera tanta insatisfacción en las mujeres. Me dio tristeza ver que la gran mayoría de las participantes (si no son todas) tenían algún tipo de cirugía plástica: implantes de senos y glúteos, nariz, liposucción… En conclusión, este es un concurso que premia a las mujeres que no se aceptan como son, a las mujeres que se autorrechazan. ¿Habrá algo más violento que promover una belleza que nace del miedo de no ser suficiente?
El problema no es promover la belleza. El problema es cuál: ¿la que puedo lograr yo mismo o la que solo puedo lograr cambiando quién soy? La naturaleza es una expresión de belleza: una orquídea, un delfín, un elefante. La naturaleza enamora con su atractivo físico, pero la orquídea no está intentando ser rosa ni el delfín está deseando ser ballena. Me gustan las mujeres vanidosas, pero que logran su físico no operándose sino cuidándose (v. gr. alimentándose bien, haciendo ejercicio, protegiéndose del sol, etc.).
Además de promover la belleza adulterada,
fomentamos que las mujeres
se centren solamente en su exterior
Además de promover la belleza adulterada, fomentamos que las mujeres se centren solamente en su exterior. Encontré una invitación de Soho y La Mega a participar en el concurso de la ‘Modelo no Modelo’ (ver imagen abajo). Qué tristeza que el encanto de una mujer sea su cuerpo porque significa que solo podrá ser encantadora durante unos años (mientras le dure). ¿No es desconcertante que su físico sea la única manera de ser encantadora.
Me gustan las mujeres bonitas, pero eso no puede ser lo único que tengan para ofrecer. El Principito nos enseñó que el encanto de una mujer es invisible a la vista: su corazón, su forma de ser, la manera como trata y sirve a los demás. El interior de una mujer es su verdadero tesoro, su magia, pero esto no es lo que valoran Soho ni Cerveza Águila ni tantas otras marcas cuya mayor preocupación es vender, así sea a costa de la explotación de seres humanos en un sentido netamente superficial y falso.
Invitaría a estas dos marcas, a tantas otras y al Reinado Nacional de Belleza que promuevan la belleza natural e interna en vez de aquella plástica y superficial.
El sector privado le pide a los políticos que sean honestos y que busquen el bienestar general por encima del propio, pero ¿será que pueden exigir esto si como empresas mienten y buscan aumentar sus utilidades a costa de la salud y bienestar mental de las personas?
@acardenas999