Hace unos meses escribí en una columna: “La disputa en primera vuelta tiene dos figuras preponderantes innegables: Petro y Rodolfo. Fico es un maquillado de los medios y las encuestas y por un electorado en permanente picada y deserción”.
Hoy, y pese a que no creo en las encuestas, al menos en sus cifras, aunque las tendencias nos puedan dar algunas luces, Rodolfo viene en ascenso, mientras Fico parece no pasar del techo del 20%.
El pánico de Uribe es evidente, al punto, que lo ha llevado en una loca carrera en un sentido u otro. Primero le zuluaguiza la campaña a Mafe y sus “juventudes Cabal” sacando del armario a Oscar Iván. Luego, le zuluaguiza la campaña a Zuluaga no permitiéndole coalición alguna, apoyando a Fico el 13 de marzo, terminando en la “renuncia voluntaria” de Oscar Iván”. Una “autojugadita”.
Ahora, ¿A una semana de elecciones el “as” bajo la manga resulta ser Rodolfo? ¿Y ahora le zuluaguiza la campaña a Fico, dejándolo vestido y literalmente con los crespos hechos?
Paloma Valencia escribe en su cuenta de Twitter: “Vamos a derrotar a Petro, votaremos por quien lo enfrente”. Esta es una clara señal del viento que sopla en favor de Rodolfo. No porque el ingeniero represente las banderas del uribismo, ni porque sea su aliado, sino porque con tal de restarle a Petro estos harían incluso pacto con el mismísimo.
Por su parte, Fico no para de tener salidas en falso que las redes sociales registran continuamente. Su discurso es flojo y siguiendo el libreto del 2018. Ha ido perdiendo impulso en la medida en que, quienes lo apoyaron para inflar su candidatura en la consulta han entrado en franca deserción de su campaña.
Rodolfo reuniría indecisos e inconformes con los extremos polarizados, y más, con todo aquello que pueda representar una extensión de Duque y un gobierno que continúe la carrera alocada y descarada de la corrupción.
Lo que se traduce en el ascenso de Rodolfo y la muy probable acelerada que lo llevaría a superar a Fico, y la posibilidad de pasar a una segunda vuelta con Petro.
Nada está escrito, lo cierto es, que la compra de votos y el fraude están servidos a la mesa. Como también, la gran posibilidad de que el arribo de Ingrid a su campaña, traiga un propósito y encomienda que puede tener un doble filo, de la misma forma que lo hizo en la coalición de Robledo. Un solo trino y acaban con el impulso de Rodolfo.
En otra ocasión expresé: “Está de alquilar balcón”.
