Trump y Bolsonaro, que enfrentan la pandemia como un juego de vanidades, con orientaciones que rayan en lo criminal, salen con el cuento de derecha e izquierda frente a la ciencia
Que las puertas en una avalancha no se pueden abrir un poquito porque se viene la montaña encima. Eso parece estar sucediendo con el covid-19 en este desordenado país
Detrás de la cortina de la representación diaria y ya cansona de “buen gobierno”, aparecieron actores que el director no quiere ver: crisis económica, asesinatos de líderes sociales, cárceles, narcotráfico…
Petro y Uribe han hecho de Twitter su trinchera política. Son igualitos, no nos dejan descansar ni 1 minuto, no le dan tregua a quien consideran enemigo y hacen campaña para todo
Qué extraño que en el planeta solo nuestro escritor Vallejo y otros pocos coincidan en que la cuarentena no sirve, hay que dejar morir unos cuantos y enfrentarnos al bicho llamado coronavirus
En cuarentena, que hagamos ejercicios para estar fitness, que leamos libros para ser cultos, que cocinemos y bailemos mientras trapeamos. ¿Dormir o hacer siesta? ¡Sería malgastar el tiempo!
En sectores pobres de Bogotá empezaron a verse trapos rojos en las puertas para indicar que están pasando hambre, que no han llegado ayudas, que su situación es desesperada