De solo ver lo que está pasando con las ferias de avales que entregan los partidos políticos con poca filtración de calidades, sabremos que no hay de dónde
Desde la comodidad de un trino o una bala digital en redes sociales, hay un mundo de distancia con el país real, cansado de la guerra intestina de las bacrim, disidencias farianas, elenos
Somos caribes en medio de las adversidades de un país melancólico y alegre. Que llora sus muertos en medio del fandango. Que se resiste a la paz como si fuese un embeleco de la política