Aunque la Procuraduría suspendió al alcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández por tres meses después de golpear al concejal John Claro, Hernández se movió audazmente y logró regresar a su despacho tras interponer una tutela que fue admitida por el Tribunal Administrativo de Santander que ordenó levantar la medida en su contra. Y a pesar de que la Procuraduría puede apelar la decisión, el sistema judicial entra a vacaciones el próximo 20 de diciembre, por lo que solo podrá hacerlo en enero cuando arranquen nuevamente actividades. Rodolfo Hernández recibió la notificación en el momento preciso y el gobernador deberá anular el decreto que nombró al alcalde encargado Miguel Azuero.
auto_admite_tutela_vincula_y_decreta_medida_provisional_2018-1017-00