Atreverse a cosas poderosas (II)

Atreverse a cosas poderosas (II)

Como comprar con dinero el aeropuerto de Santa Ana no ha sido posible, se puede intentar negociar con algo crucial para Cartago: el agua

Por: Juan Nicolás Gaviria B.
marzo 03, 2021
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Atreverse a cosas poderosas (II)

Les contaba en la primera parte de esta serie que en el mediano plazo, y de cara a la estrategia y agenda de competitividad municipal y departamental, nuestro aeropuerto no cuenta con las condiciones para ser un hub de carga, además nuestra geografía tampoco ayuda.

Les contaba también que la opción más próxima sería comprar el aeropuerto de Santa Ana en Cartago, idea que ha surgido en diferentes oportunidades y diferentes espacios, pero que al final se queda en eso. Súmele a eso que todas esas veces se ha planteado un único mecanismo para su adquisición, una transferencia de dinero.

Es por eso por lo que advertí al final de la primera parte de esta serie que se me ocurría una idea alternativa para su compra. Idea que supone comprar ese activo no con dinero, sino con algo crucial para el municipio vecino, el agua.

Resulta que Cartago tiene un problema bastante serio en lo que respecta a la calidad del agua que distribuye a sus ciudadanos, según el Informe de Auditoría Gubernamental con Enfoque Integral, Modalidad Especial Calidad del Agua y estado de los sistemas de Tratamiento de Aguas Residuales en la Zona Rural del Municipio de Cartago (2017), el agua que toman nuestros vecinos de Cartago en su zona rural, está cerca de no ser apta para el consumo humano.

En dicho informe se advierte que “(…) se pudo evidenciar que en 4 localidades el grado de ocurrencia de enfermedades relacionadas con el no cumplimiento de las características físicas, químicas y microbiológicas del agua para consumo humano es muy alto (…)”. Lo anterior obedece en gran medida a la calidad del agua cruda que tratan de potabilizar estos acueductos, la cual en su mayoría —sino en su totalidad— proviene de la cuenca del río La Vieja, cuenca que desafortunadamente al momento de llegar a Cartago ya viene bastante deteriorada.

Ahora bien, en lo que respecta al agua que se consume en el perímetro urbano y es suministrada por Emcartago, se puede advertir que es de buena calidad. Su índice IRCA (Índice de Riesgo de la Calidad del Agua para consumo humano) se ha mantenido por debajo del 1% lo cual es muy bueno, pues el indicador debe estar por debajo de 5% para que se considere “sin Riesgo, agua apta para el consumo humano”.

Sin embargo, ese indicador nada nos dice sobre el costo que implica tomar agua del río La Vieja, llevarla a ese nivel de calidad y bombearla a través de la red de suministro, red que entre otras cosas y dicho por el gerente de Emcartago, se encuentra en pésimas condiciones. Estos dos elementos hacen que el costo por metro cúbico de agua que se entrega en Cartago sea bastante oneroso.

En ese orden de ideas, me puse en la tarea de comparar tarifas, pues no faltará quien diga que estoy loco, y resultó que en efecto el agua que consumen lo cartagueños, si bien de "buena" calidad, también cierto que resulta bastante costosa en comparación con la que consumimos en Pereira.

Como pueden ver, si bien los cargos fijos en Cartago presentan un comportamiento favorable exceptuando los estratos bajos, el cual me atrevo a advertir deben comprender la mayoría de las viviendas en Cartago; las otras tarifas se observan más económicas que en Pereira, pero eso tampoco nos dice la verdad de las cosas. La tarifa por metro cúbico es la que nos marca la pauta.

En ese sentido, podemos ver como las tarifas en Cartago por metro cúbico son considerablemente más costosas que en Pereira, esto como lo mencioné anteriormente obedece a los costos de potabilización y distribución en los que incurre la empresa Emcartago, pues estas tarifas no son fijadas al azar, ellas derivan de metodologías reglamentadas y vigiladas.

Ya evidenciamos entonces que, nuestra agua es más barata pues es más fácil de potabilizar por la calidad de nuestra cuenca y más fácil de transportar toda vez que ella viaja por gravedad y no por bombeo. Ahora hablemos de como se la podemos vender a Cartago.

En este punto algunos dirían, “este tipo le quiere venderle nuestra agua a la gente de Cartago”, "nos va a dejar sin agua", “el río Otún no da para tanto” y tendrían razón. Es por eso que se me ocurre lo siguiente.

El plan maestro de seguridad hídrica de Pereira advierte, que la ciudad deberá identificar y asegurar nuevas fuentes de suministro hídrico para los próximos 50 años. En ese orden de ideas la primera fuente que sale en la discusión es la del río Consotá, sin embargo y como les he contado en otras columnas, contamos con otra adicional, más fácil de usar y además, cerca de Cartago.

Me refiero al agua subterránea de la zona de expansión de Pereira y Cerritos en general. Como les contaba en la columna titulada Infraestructura verde, esta zona de la ciudad cuenta con unas condiciones excepcionales de reserva y recarga hídrica que debemos garantizar para el futuro, y que la forma de garantizar este recurso es a partir de la infraestructura verde.

Pues bien, allí tendríamos la llave para comprar ese aeropuerto para los pereiranos. Se me ocurre entonces que la ciudad en cumplimiento de su plan maestro de seguridad hídrica podría iniciar el proceso de aseguramiento de zonas estratégicas en la zona de expansión y Cerritos, desarrollando allí sistemas de extracción y distribución.

De esta forma, y a través de líneas expresas que bajen a Cartago por gravedad, podríamos pensar que desde Cerritos se puede distribuir agua “en bloque” a Cartago, esto sin contar con la estación de microgeneración de energía con turbinas que podríamos instalar al final del recorrido.

Estamos hablando de adelantarnos 50 años en el futuro, a lo que será la infraestructura que requerirá nuestro municipio para garantizar nuestra seguridad hídrica.

Ahí dejo esa idea loca para que nos compremos un aeropuerto, ubicado a 900 metros sobre el nivel del mar, con condiciones inmejorables, uno que necesitamos para consolidar la estrategia de competitividad regional y dejar asegurada el agua y la infraestructura que necesitaremos en 50 años.

Una idea loca o poderosa, ustedes me dirán. En todo caso, de esas que han hecho de Pereira lo que es, una pionera.

"Dare mighty things".

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
La Nota Ciudadana se va de vacaciones

La Nota Ciudadana se va de vacaciones

Nota Ciudadana
De la euforia de la COP a la incertidumbre: los anuncios del MinCulturas ante su encrucijada para 2025

De la euforia de la COP a la incertidumbre: los anuncios del MinCulturas ante su encrucijada para 2025

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--