La eterna noche de las doce lunas llega a la salas del país después de recorrer los festivales del mundo. Esta película documental sobre la cultura Wayúu se estrena en agosto para mostrar el ritual de la menstruación en esta comunidad. Los indígenas cuentan 12 lunas, 365 soles y una lluvia en los que las niñas deben permanecer aisladas para encontrarse con la vida adulta, aprender los quehaceres de la casa y una labor muy importante para la mujer Wayúu: tejer.
Las niñas se separan de los demás miembros de la familia en un cuarto dividido por una cortina en donde se cuelga un chinchorro o hamaca y permanecen completamente inmóviles. Durante los días de la menstruación son bajadas del chinchorro sólo para ser bañadas por su madre o abuela con infusiones de plantas indígenas, para sacar las impurezas y los malos pensamientos.
Al finalizar “el encierro” como se le llaman a este ritual, la niña es presentada ante los demás miembros de la sociedad como una señorita omajayut. Se realiza una gran fiesta en su honor, como símbolo del comienzo de su nueva vida como adulta.
Priscila Padilla es la directora de este documental que busca mostrar un ritual poco conocido en nuestro país.