Pañales, una toalla, la tapa de un tetero y pisadas fueron las pistas que le confirmaron al entonces brigadier general Pedro Sánchez que los hermanos Mucutuy: Lesly, Soleiny, Tien Noriel y Cristin, de la etnia uitoto estaban vivos en la profundidad de la selva del Guaviare.
Días antes la avioneta en la que se transportaban con su mamá sufrió un accidente, ella no sobrevivió ni tampoco el piloto, pero no encontraron los cuerpos de los niños.
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El brigadier general Pedro Sánchez lideró el operativo de búsqueda y rescate del Comando Conjunto de Operaciones Especiales la denominada ‘Operación Esperanza’ de los cuatro niños indígenas. A su lado, estaban más de 350 hombres, incluidos 70 indígenas de varias comunidades que sabían moverse en las selvas del país para ubicar a los cuatro niños perdidos en la selva del Guaviare.
Sobre las condiciones en las que se perdieron los hermanos Mucutuy, Pedro Sánchez describió el entorno como una selva hermosa pero hostil. Árboles muy altos, vegetación muy densa con animales peligrosos como tigres, jaguares, serpientes venenosas, plantas venenosas, mosquitos que transmiten enfermedades que te pueden matar. No se ve algunas veces el sol, no alcanza a llegar. Llueve 16 horas al día algunas veces. Un lugar que perfectamente se lo puedo tragar a uno en cualquier descuido”.
Pasó un mes, pero el general Pedro Sánchez mantenía las esperanzas vivas de hallar a los niños e impidió que se detuviera la búsqueda, que desde el día cero avanzó por tierra y aire.

La primera opción de cancelación era cuando los encontrara y tuviera en su poder sanos y salvos. Pedro Sánchez se rehusaba a que la selva le ganara la batalla, solo lo haría cuando sus fuerzas técnicas, tácticas y militares se agotaran.
El general Pedro Sánchez encontró huellas de los niños junto a huellas de un animal, serían las huellas de Wilson, uno de los perros guías del Ejército que se perdió mientras los estaban buscando.
Cuarenta días después de la Operación Esperanza, el general Pedro Sánchez encontró a los hermanos Mucutuy. Lesly, la hermana mayor de los Mucutuy, tuvo el papel de autoridad y liderazgo creativo no solo con los refugios que armó para sus tres hermanos menores, sino que en el caso de la comida, cuando esta se acabó, masticaba frutos y los ponía en el biberón para el menor de ello.

El brigadier general Pedro Sánchez siempre dejó abierto el misterio de por qué se dice que los niños se callaban cuando las fuerzas de búsqueda pasaban cerca de ellos. Algo que confirmó Sánchez al afirmar que en alguna ocasión estuvieron a 40 metros y que Lesly logró escuchar a soldados, indígenas y parlantes, pero por alguna razón no salió al encuentro. Esto es algo que se sabrá algún día, cuando los protagonistas decidan contar en su propia voz lo que sucedió en una aventura de 40 días perdidos en la espesa selva del territorio colombiano y que, gracias al trabajo conjunto entre indígenas y militares, tuvo un final que todos querían, pero pocos esperaban.

El premio por el rescate de los hermanos Mucutuy del Presidente a Sánchez: el Ministerio de Defensa
El rescate de los cuatro niños indígenas fue clave para que el presidente Gustavo Petro nombrada a Pedro Sánchez como Ministro de Defensa. Hace un mes le había delegado la tarea de ser su jefe de seguridad de él y su familia, una decisión que tomó en reemplazo de Carlos Feria.
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El Presidente no ha dudado en reconocer la hazaña de Pedro Sánchez y fue sin duda uno de los puntos a favor para que el general, con 6.800 horas de vuelo fuera el escogido para ser el nuevo ministro de defensa.