La reelección del Presidente Juan Manuel Santos está atravesando por uno de los momentos más difíciles por cuenta de los señalamientos de presuntas filtraciones de dineros del narcotráfico en la campaña del año 2010. La denuncia la hizo el expresidente Álvaro Uribe, quien dijo tener pruebas de que el estratega J. J. Rendón, le habría entregado dos millones de dólares a la campaña para tapar algunas deudas. En ese mismo sentido, Uribe señaló que es probable que ese dinero haya salido de los presuntos 12 millones de dólares que el narcotraficante Javier Antonio Calle Serna, alias 'Comba', dijo haberles entregado a Rendón y al exconsejero político Germán Chica, para que le ayudarán a negociar un acuerdo de no extradición con el gobierno Santos.
Aunque este aporte que denunció Uribe no aparece en los libros de la campaña, que también fue dirigida por Roberto Prieto (actual gerente de la reelección), en los registros oficiales hay sorpresas. Entre las cerca de quinientas personas naturales que se metieron la mano al dril para ayudar a Santos, aparecen empresarios, políticos, representantes de grupos económicos y prestantes familias, que a título personal o a través de terceros le brindaron su apoyo económico al hoy presidente candidato.
Entre los mayores aportantes que donaron desde $25 hasta $120 millones están los socios de Interbolsa, Rodrigo y Tomás Jaramillo, con una donación de $100 millones; la familia de Óscar Iván Zuluaga, propietarios de la empresa Acesco, hicieron seis donaciones que suman $82 millones; por su parte Gina Parody, donó $100 millones mediante cuatro aportes a través de sus colaboradores William Mendieta, Ana Pilar Torres, su contadora, y dos empleados de empresas de su familia (Luis Enrique Sibaja, gerente financiero de Ultramar y José Guillermo Velasco, gerente de Nautiservicios).
El principal donante individual fue Juan Pablo Cavelier, presidente del grupo Alkeria con $120 millones. Otros empresarios que aportaron a su campaña fueron Andrés Uribe Crane y Carlos Andrés Uribe Arango propietarios de la ladrillera Santafe, cada uno con $50 millones; mientras Roberto Moreno, presidente de la constructora Amarilo, dio $20 millones; a su vez Carlos Mattos, presidente de Hyundai Colombia que le dio con $50 millones; así como Jaime Abraham Murra, presidente del Grupo Diana, con $50 millones; Henry Cubides Olarte, propietario del Atlètico Buramanga con $25 millones; Alberto Azout, socio del grupo Vivero quien también aportó $ 25 millones.
Juan Manuel Santos contó con un importante aliado para apalancar su campaña del 2010. el Grupo Colpatria. Un conglomerado de la familia Pacheco Devia, accionista mayoritaria, que le otorgó dos créditos que sumaban once mil seiscientos setenta millones ($11.670.000.000) y que el candidato cubrió con la reposición de los más de ocho millones de votos que obtuvo.
Más de quinientas personas naturales le aportaron otros $2.329.685.000. Santos recibió el 20% del total de su campaña de aportes particulares. Muchos de ellos empresarios que tuvieron que donar a título personal ya que la ley (996 de 2005 - ley de garantías) prohíbe a las empresas hacer donaciones para campañas presidenciales.
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Los candidatos a la Presidencia para el 2010 contaban con un tope autorizado por el Consejo Nacional Electoral de 17 mil millones. Santos solo se gastó 14 mil millones y no utilizó el anticipo que ofrece el Estado sobre la expectativa electoral. La reposición por voto para un candidato que haya accedido a dicho anticipo era de $2.067, mientras que para quien no haya recurrido a dicha ayuda, la cifra ascendía a $4.217 por cada voto contabilizado a su favor.
Aunque en teoría debió recibir más gracias a los cerca de 9 millones de votos que alcanzó, la ley solo permite que se le reponga lo equivalente a los recursos que el candidato haya gastado y que fueran obtenidos mediante créditos u otras formas de financiación. De manera que Juan Manuel Santos logró cubrir el total del los créditos bancarios gracias a la reposición de los votos, según explicó el gerente de la campaña Roberto Prieto, quien advirtió que ningún caso la campaña recibe más dinero del que se haya gastado
Este año los candidatos a la Presidencia pueden gastar hasta 19 mil millones a excepción del Presidente-candidato Juan Manuel Santos, que solo podrá gastar 13 mil millones en aras de la equidad frente a sus contendores que no tiene el mismo acceso a medios ni cuentan con las ventajas que por naturaleza tiene un mandatario que busque reelegirse.
