Reunió un gran interés ciudadano. Muchos jóvenes visitaban galerías o atendían las solicitudes de los visitantes. Hubo el circuito de siempre de la logística de un transporte gratuito —esta vez, más democrático—. Por el acento, se registraba asistencia de latinoamericanos en el barrio San Felipe donde se ha establecido el arte Contemporáneo. Hubo debates, conferencias y fiestas. Y superbien coordinado con otro evento de FotoMuseo.
Fui a la conferencia en la Cámara de Comercio sede Chapinero. “Más allá de cubo blanco” donde intervinieron dos panelistas. Renaud Proch, director ejecutivo de los curadores independientes y el único gringo de una asistencia de por lo menos 120 personas que condicionó al irrespeto de la audiencia colombiana que tuvo que utilizar la traducción simultánea cuando él era el único que la necesitaba –gastos innecesarios y un gran irrespeto con el público—. El otro panelista fue un colombiano de Medellín: Camilo Restrepo —curador de Arquitectura— que prefirió hacer su presentación en inglés en donde sus teorías no son nuevas. Dicken Castro lo demostró en su estudio sobre las construcciones en el eje cafetero hace 20 años y Simón Hosie reconstruyó El Salado con la filosofía de enmendar la confianza personal en la educación. Nada nuevo. Mientras tanto, el trataba de indagar sobre la identidad en el territorio que tiene valor social o ambiental. Nada nuevo.
Proch, refrendó su existencia como protagonista del arte mientras explicaba que los curadores saben a quién se le permite hablar sobre el arte contemporáneo porque ellos tienen la oportunidad de promover la diversidad de ideas. A ellos les interesa referirse a un arte moderno global y a un intercambio cultural transregional. Ellos son los únicos que pueden certificar la evolución del arte... y saber quién entiende y qué opina. Esa trayectoria ya lleva años donde el protagonista aburre. Se trata de un monólogo y tener que atrapar la intención de la obra de un artista mediante un discurso curatorial. Tres frases serían suficientes para no sentirse necesarios sino, simples intermediarios.
Como abarca mucho y llegue a pocos. Les dejo un reportaje gráfico. Y ustedes tienen la palabra.
Norman Morales, Guatemala, 1979. Su trabajo busca deambular sin rumbo por las ciudades
Andrea Canepa. Le interesan programas pedagógicos experimentales de la segunda mitad del siglo XIX, influenciados por la teoría del alemán Friedrich Foebel
Sandra Llano, 1951. Colombia en Instituto Visión
Tania Candiani, México, 1974. Le interesan las implicaciones políticas en lo doméstico
Gabriel Antolínez, Libélula, Librería Central Contemporánea
Fotos: Ana María Escallón