Con una masiva e inesperada participación, sobre todo de las bases conservadores provenientes de las regiones, arranca la convención que resolverá si los Conservadores van con candidato propio o se adhieren a la reelección del Presidente Santos. Con la ausencia de los expresidentes Belisario Betancourt y Andrés Pastrana, los 1.500 convencionistas acreditados decidirán por medio voto electrónico.
Las bases del partido y los simpatizantes de los precandidatos piden candidato propio, mientras la bancada parlamentaria que se ha beneficiado de la mermelada del Palacio de Nariño le apuesta a Santos. Este grupo lo lidera Efraín Cepeda, el más beneficiado por los contratos y los nombramientos del gobierno, quien se la está jugando para que el Partido apoye a Santos y de lograrlo, convertirse en su fórmula vicepresidencial. Lo malo para Cepeda es que en las encuestas internas del partido no lo favorecen, solo marca un 4%, con lo que queda en evidencia su baja figuración.
Es una convención en la que el discurso de los tres precandidatos; Martha Lucía Ramírez, Pablo Victoria y el ex ministro Álvaro Leyva, puede marcar la diferencia. La herramienta electrónica hace que el voto sea anónimo y confirma que puede pasar cualquier cosa. Solo al final de la tarde habrá humo blanco.
