Gran revuelo ha causado para muchos araucanos conocer que el exgobernador José Facundo Castillo busca volver a la gobernación de Arauca —de hecho, dicen que anda buscando el aval del Partido Cambio Radical y el Partido de la U—. El estupor no es para menos conociendo la regular administración que realizó en el cuatrienio que estuvo como máxima autoridad departamental.
Ahora bien, más allá de que la labor de Facundo como máxima autoridad departamental no haya sido eficiente, son tal vez los presuntos —porque son varios— complejos de corrupción que han conocido las autoridades y la opinión pública.
Para ser más exactos, si se examina el Sistema de Información Misional (SIM), en la página de la Procuraduría General de la Nación, se pueden encontrar una serie de investigaciones que van desde el año 2013 hasta el 2018. Investigaciones que en su mayoría están relacionadas con irregularidades en la contratación estatal efectuada cuando el señor Facundo fungió como gobernador. Cabe recordar que son más de 15 investigaciones las que actualmente aparecen en la página web de la Procuraduría.
En ese cúmulo de investigaciones se ejemplifican en casos tan polémicos como el famoso avión ambulancia que se compró en 2014 y que costó más de 8000 millones de pesos y que un año después se entregó en concesión a una empresa bogotana. Por este hecho ya han sido capturados varios exfuncionarios del exgobernador.
En la actualidad, la Fiscalía General de la Nación sigue indagando hasta qué punto tiene injerencia Facundo en el complicado episodio de irregularidades que representó la compra de la aeronave y la concesión a la empresa Colcharter.
Pero los ruidos de corrupción de Facundo Castillo se esparcen hacia áreas tan diversas como la alimentación escolar. No en vano el exgobernador tiene tres procesos abiertos que suman más de 6000 millones de pesos —uno de los procesos ya fue imputado—.
Vale la pena hacer alusión que los líos de Facundo Castillo en cuanto a los manejos de la gerencia pública no se remiten a su periodo como gobernante de Arauca, sino que vienen de tiempo atrás, como lo muestran los cuestionamientos en el manejo de los recursos durante los seis años que estuvo al frente del hospital de San Vicente de Arauca.
Y es que si se hace una pequeña pesquisa sobre la situación jurídica de Facundo en la actualidad, se da uno cuenta que en la Fiscalía General de la Nación el exfuncionario tiene investigaciones por un abanico de delitos como: prevaricato por omisión y por acción, peculado por apropiación, delitos contra la administración pública, fraude a resolución judicial, amenazas, entre otros.
De otro lado, es adecuado recordar los constantes ruidos que recorren el departamento sobre una posible relación del exgobernador con el grupo subversivo Ejército de Liberación Nacional (ELN), ya que 3 hermanos de Facundo Castillo han sido procesados por tener vínculos con esa organización terrorista. Este asunto es muy delicado porque en Arauca siempre han sido bastante graves las denuncias sobre la intromisión en política del ELN.
En ultimas, esta nota más que un recuento de los hechos cuestionables que realizó Facundo cuando fue gobernador del departamento y de una posible alerta de lo que podría pasar de volver a llegar al cargo, es una convocatoria a votar por personas que valgan la pena y no utilicen el erario público para llenar las arcas personales. Los araucanos ya estamos cansandos de la corrupción y las malas administraciones.
