A manos de funcionarios de Riad y premeditadamente planeado fue ejecutado el plan para acabar con la vida de Kashoggi. Así de clara se expresa Agnes Callamard, la investigadora encargada por la ONU para aclarar las circunstancias de la muerte del crítico y articulista saudí Jamal Khashoggi. En un documento parcial, publicado el jueves, Callamard concluye que "las pruebas presentadas durante nuestra misión en Turquía demuestran a 'prima facie' que Khashoggi fue víctima de un asesinato premeditado, planificado y perpetrado por funcionarios del Estado de Arabia Saudí y otros actuando bajo la dirección de estos agentes del Estado".
Aparte de darse cuenta de que el gobierno saudí sí tuvo que ver dentro del asesinato, la investigadora comprobó que las autoridades de ese país no quieren encontrar la verdad, pues no cooperaron para nada en la investigación.