Aunque su vida dentro del fútbol terminó y salió de él por la puerta de atrás, con escándalos a bordo, el exmillonarios, donde mal cerró su carrera, ha demostrado que al menos para los negocios y para fabricar dinero no se le ha acabó el éxito.
Fredy Guarín hizo bastante plata durante su paso por el fútbol colombiano e internacional. En el país jugó para Atlético Huila, Envigado y Millonarios y por fuera fue ficha del Bocas Juniors, Saint-Étienne, Porto, Inter de Milán, Shanghái Shenhua y Vasco de gama, equipos donde fue bien pago.
Aunque Guarín ha tenido una vida desordenada y escandalosa, debido a sus relaciones amorosas con su exesposa Andreina Fiallo y la presentadora Sara Uribe, y a altercados familiares y con hinchas, en las que ha sido hasta detenido por la policía, el nacido en Puerto Boyacá ha sabido invertir los millones que ha recibido. Del jugador de fútbol solo queda la sombra y hoy es un buen empresario.
La última gran inversión de Fredy Guarín son los bienes y raíces. Está construyendo un edificio con apartamentos de lujo en el exclusivo barrio de Piedra Pintada Parte Alta, en Ibagué, que valen entre 230 y 518 millones de pesos. La construcción y la venta de este edificio que se llama G Level, ya está en construcción.
Este mega edificio se une a los otros negocios que llenan las cuentas bancarias del exjugador. Fredy Guarín es dueño de un criadero de caballos de lujo. También es propietario de una joyería puesta en Ciénaga de Oro en el departamento de Córdoba. El pasado mes de enero abrió una lujosa barbería, café, bar y restaurante, puesta en el exclusivo barrio El Poblado, en Medellín. Con todos estos negocios y alejado de balompié Guarín demostró que es bueno para fabricar dinero.