La congresista, exconcejal y antes alcaldesa de Chapinero, responsable del deterioro evidente de la localidad gracias a sus ‘’zonas de tolerancia’’, ahora le miente al país al intentar desviar la atención asegurando que su relación con la senadora Claudia López solo es de novias, cuando todos los que las conocemos sabemos que para la época de las elecciones de marzo de este año, no solo ya eran novias sino que tenían una ’unión permanente’. Esa ’unión permanente’ es un hecho notorio para la época de las elecciones, tanto así que antes de inscribirse y hacer campaña en pareja, ya convivían juntas y aún hoy conviven. Con respeto por un respetado medio de comunicación como Las2Orillas que ha dado muestras de integridad, rigor e independencia, con este titular trate de borrar de un plumazo una realidad: la de la Ley. Que la nota titulada "Quieren sacar del Congreso a Claudia López y a Angélica Lozano por su relación de pareja" le atribuya todo a la manida estratagema politiquera en Colombia en la que todo lo que afecte los intereses de algunos que creen intocables, se califica de discriminación y persecución.
NO. En este caso se trata de cumplir a cabalidad con la carta política. La ley de inhabilidades e incompatibilidades aplica para todos y todas, sin importar raza, creencia ni orientación sexual; para cristianos y moros. Es por eso que este hecho no tiene nada que ver con preferencias sexuales, es un tema de transparencia de parte de las honorables congresistas. El régimen lo que busca es prevenir el conflicto de interés para quienes cumplen funciones públicas. Ahora, ¿no podrá ser que las llamadas minorías o comunidades por su opción sexual pueden faltar a la transparencia pública, o sí?
Las congresistas Claudia y Angélica, expertas en señalar a los demás, por supuesto que tienen derecho a tener su vida privada y a tener la orientación sexual que prefieran como cualquier persona en un país libre y demócrata como lo es Colombia. Eso nadie lo debería ni discutir si quiera. Y la libertad de prensa debe prevalecer ya que es el tanque de contención contra los abusos del poder. Como dicen, el periodismo es el guardián de la democracia, pero amparados en ello, ni las parlamentarias, ni los medios de comunicación, ni nadie, se puede sustraer del orden constitucional y de la ley que nos rige a todos por igual. Iguales derechos, iguales deberes.